El alto tribunal determinó que se encuentra “ilegalmente privado de su libertad” y que cumplió la pena fijada el 14 de junio de este año; en la actualidad permanece internado, a raíz de una huelga de hambre.
La Corte Suprema de Chile resolvió este viernes que el líder mapuche Facundo Jones Huala “se encuentra ilegalmente privado de su libertad” en el país trasandino y dispuso su liberación inmediata.
Los jueces Manuel Antonio Valderrama Rebolledo y Leopoldo Andrés Llanos Sagristá hicieron lugar a un amparo presentado por los abogados defensores del dirigente mapuche, perseguido penalmente en la Argentina y en Chile por sus violentas ocupaciones de tierras. Al fundamentar su decisión, os ministros de la Corte indicaron que “la privación de libertad se ha extendido por un tiempo superior al cual el Estado de Chile se obligó”.
En su sentencia, los magistrados repasan los hechos acaecidos desde el 21 de diciembre de 2018, momento en que Jones Huala fue condenado en Chile a dos penas: la primera, de seis años de prisión, por el delito de incendio, y la segunda, de tres años y un día, por el delito de portación ilegal de armas de fuego prohibidas.
En enero de 2022, el líder de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) recibió la libertad condicional. Esa resolución fue revocada por la Corte Suprema chilena y Jones Huala estuvo prófugo, hasta que fue detenido en enero de 2023 en El Bolsón.
Durante su permanencia en la Argentina, Huala encabezó ocupaciones ilegales en terrenos de la Patagonia, en medio de una ofensiva de ataques violentos, amparados en reclamos de comunidades mapuches.
Extraditado, finalmente, en enero de este año, a Jones Huala le faltaba cumplir un año, cuatro meses y 17 días de pena en Chile. En la sentencia conocida ahora, los jueces de la Corte Suprema confirmaron que “el 6 de febrero de 2023 la Corte de Apelaciones de Valdivia acogió la solicitud de extradición, con el fin de que el amparado cumpliera el saldo de condena, fijando como periodo el de un año, cuatro meses y 17 días, equivalente a 503 días”.
Asimismo, advierten que “la información proveída por el Estado de Chile a la República Argentina fue errónea, pues el saldo de pena por cumplir que le restaba al condenado al momento de revocársele la libertad condicional era de 887 días”. Y agregan: “Al abonar el tiempo que estuvo privado de libertad en la Argentina, en virtud del proceso de extradición, se genera un saldo final de 522 días de privación de libertad que le restan por cumplir, dado que dicho saldo de pena lo comenzó a cumplir el 4 de enero de 2024, siendo la fecha de término o cumplimiento de la condena el 8 de junio de 2025″.
Esa fue la fecha que los abogados de Jones Huala comenzaron a cuestionar en junio pasado, cuando ellos consideraban finalizada la condena. Más allá de los cálculos de las autoridades penitenciarias, los jueces de la Corte advirtieron que, al declarar procedente la extradición, se fijó un saldo de pena preciso y acotado de un año, cuatro meses y 17 días.
“A este periodo de tiempo se debe descontar el abono efectuado por el Juzgado de Garantía de Río Bueno, correspondiente al tiempo que el amparado permaneció privado de libertad en la Argentina durante la tramitación de la extradición, correspondiente a 11 meses y cinco días, lo que equivale a 341 jornadas. Así las cosas, la cantidad de días que le resta cumplir a Jones Huala es de cinco meses y 12 días, que corresponden a 162 días. Teniendo presente que el condenado reingresó a cumplir el saldo de pena el 4 de enero del este año, la pena se cumplió el 14 de junio de 2024, de manera que se encuentra ilegalmente privado de su libertad”, concluyeron.
En diálogo con LA NACION, el abogado Gustavo Franquet indicó que, si bien deben liberar inmediatamente a Jones Huala, el líder mapuche permanece internado en el Hospital Intercultural de Nueva Imperial, a unos 35 kilómetros de la cárcel de Temuco a raíz de la huelga de hambre que inició a finales de junio pasado para exigir su liberación. “Se estima que permanecerá un tiempo en el hospital hasta que se recupere”, afirmó.