El diputado Walter Martello habló en la 99.9 sobre la fuga en el penal de General Alvear de los tres condenados por el triple crimen de General Rodríguez: “fueron 8 años de connivencia y autonomía. Hubo muchas denuncias por tortura dentro del Servicio Penitenciario y nunca hubo una renuncia de magnitud. Se dejó hacer”, indicó.
La fuga en el penal de General Alvear a suscitado un nuevo margen de sospecha sobre el funcionamiento del Servicio Penitenciario provincial respecto de las autoridades salientes. Ese análisis lo realizó en la 99.9 el diputado Walter Martello que siempre fue muy crítico de este tema.
“Quedamos muy conmovidos con la noticia”, indicó primeramente. Luego abundó: “los tres detenidos eran los más importantes que tenía la provincia, estaban en una prisión de máxima seguridad y además, contaban con una orden de una jueza para que se le agregaran aditamentos adicionales a su control. Sin embargo se fugaron con un arma de madera y ropa parecida a los uniformes del propio Servicio Penitenciario. La fuga estaba preparada de antemano porque había una camioneta esperándolos en la puerta”.
Todos estos detalles, se tienen que poner en el análisis del funcionamiento de esta fuerza destinada a controlar a los presos de la provincia: “esto desnuda lo que es el Servicio Penitenciario y lo que ha sido durante la etapa anterior un manejo autónomo respecto de las autoridades o incluso cómplice. Eso se debe dilucidar ahora”, destacó.
Se ha desarrollado una complicidad manifiesta que pasaba por mirar hacia otro lado ante distintas denuncias: “fueron 8 años de connivencia y autonomía. Hubo muchas denuncias por tortura dentro del Servicio Penitenciario y nunca hubo una renuncia de magnitud. Se dejó hacer”, agregó después.
A partir de esta fuga, se tendrá que replantear seriamente el estado del Servicio Penitenciario, pero se debe renovar para un modelo superador: “la pregunta es a quien le conviene la fuga. Es muy raro todo como para que no se investigue. Está bien la declaración de emergencia y el desplazamiento de las autoridades del Servicio Penitenciario; pero tiene que ser un punto de partida para construir algo distinto donde se comprometan todas las fuerzas políticas a participar”, comentó Martello.
Además de estos graves ítems, están los negociados económicos que hubo detrás de las contrataciones, algo que el gobierno tampoco controló en estos años: “el sistema de compra de alimentos fue muy cuestionado y lo denunciaron muchos años. Son enormes sumas de dinero que gozaban de una autonomía que no puede ser obviada por el funcionario a cargo”.
Por último, el legislador señaló que este tipo de noticias tiene una repercusión grande a distintos niveles. Puntualmente advirtió que “pienso en los familiares de víctimas que tienen a sus victimarios detenidos, porque si se escapan estos tres de un penal de máxima seguridad, ¿que le queda al resto?”.