Se debieron contabilizar cinco años de déficit de la caja previsional del banco público.
La provincia de Buenos Aires cerró 2016 con un rojo de $ 31.047 millones, muy similar en términos de producto al que había registrado el año anterior. Sin embargo, aseguran desde el gabinete de María Eugenia Vidal , en el balance del año pasado pesó sobremanera un pasivo que el sciolismo había ocultado durante cinco años. De no ser por eso, el déficit hubiera bajado en 2016 en términos nominales en un 9% y hasta un 34% en términos reales (descontando la inflación del año).
“El resultado del año pasado tiene la contabilización de un gasto extraordinario de la caja previsional del Banco Provincia , que Scioli se había olvidado de registrar en cinco años”, dijo Hernán Lacunza, ministro de Economía de la provincia. “Computamos cinco años seguidos del déficit de la caja del Provincia. Excluyendo eso, el déficit de la provincia fue de $ 19.540 millones”, aclara.
El balance, que se publicará en detalle hoy, no sólo mostró una leve mejora con respecto al año anterior por una reasignación de gastos, sino que además la administración de Vidal recibió a comienzos de este año una transferencia de $ 25.000 millones del gobierno nacional. Para Lacunza, no se deben contabilizar estos fondos como ingresos extraordinarios, ya que en gran medida responden a una compensación por un reclamo que la provincia tiene en la Justicia por el Fondo del Conurbano Bonaerense. Este año, de hecho, esperan que la Nación les transfiera otro tanto.
“Vamos a conseguir un cambio legal o un fallo de la Corte, por eso ponemos [la trasnferencia] como ingreso corriente”, explicó Lacunza. “Es una compensación mínima que va a seguir en esa línea”. Se estima que por el congelamiento, en 1996, de su cuota en el Fondo del Conurbano Bonaerense (que se había creado originalmente durante el menemismo), la provincia deja de percibir anualmente unos $ 50.000 millones.
Los recursos tributarios de origen provincial aumentaron un 34% en 2016 (2% menos que la inflación del distrito) y los de origen nacional, en un 30,5%, por la reforma tributaria que redujo la incidencia del impuesto a las ganancias sobre los salarios.
El mayor incremento en los gastos se verificó en los asociados a los productos farmacéuticos y medicinales (39,7%), servicio alimentario escolar, plan Más Vida (asistencia a familias en condiciones de fragilidad social), Tercera Edad y Envión, la creación del programa el Estado en tu Barrio y la implementación del SAME provincial en los primeros 11 municipios (que se extenderá a 40 en 2017).
En materia de gasto, no obstante, la gestión de Vidal logró el año pasado incrementar los desembolsos en obra pública en un 142 por ciento ($ 26.700 millones). Por lo que casi duplicaron su incidencia en el gasto total: pasaron de representar el 3,7% del gasto en 2015 (era el nivel más bajo del país) al 6,3%, en 2016. “En ese marco -explica Lacunza- se inscribe el Fondo de Infraestructura Municipal que permitió incrementar la inversión de los municipios”.