Maite, hermana de Martín Campos, joven asesinado en Mar del Plata, habló esta mañana en la 99.9 sobre el curso de la causa y aseguró que se presentarán como particular damnificado. “Lo hacemos por la inoperancia del fiscal Pagella y las anomalías en las pericias”, destacó.
El asesinato de Martín Campos sigue envuelto en una nebulosa de la que parece difícil salir. A pesar de la detención de los dos supuestos responsables de matar al joven de 31 años, Matías Trivisol y Daniel López, la investigación no ha avanzado y los procedimientos habituales todavía no se han hecho.
Por esa razón, la familia de la víctima decidió presentarse como particular damnificado bajo la representación del abogado Maximiliano Orsini. Esta mañana en la 99.9, Maite, la hermana de Martín Campos, explicó: “nos presentamos como particular damnificado por la misma inoperancia que ha mostrado el fiscal Pagella y las anomalías que se están dando con la demora en las pericias. Pusimos un abogado particular porque desde el Municipio nadie se acercó. El asesino de mi hermano y el cómplice tienen un defensor público y nosotros tuvimos que pagarle a un abogado”.
Después de haberse comprometido en la causa contra la inseguridad en su barrio, Maite llegó a una conclusión que muchos comparten pero que, de sólo de pensarla, provoca escalofríos: “la seguridad en Mar del Plata es un negocio, empezando por los abogados, siguiendo con los fiscales y la Policía y todo lo que viene detrás. Es un negocio redondo para ellos. Nosotros tenemos que pagarle a un abogado y lo mismo hará el otro asesino de mi hermano, porque el abogado defensor renunció. Me pregunto cómo un delincuente que vivía en La Tapera puede pagar un abogado particular”. Luego abundó: “es un negocio redondo porque los ves ‘trabajar’ a todos, pero después son anónimos. Vos no sabés por qué el que mata sigue estando en la calle, quién lo defiende y demás. Todo el sistema es asqueroso”.
En las últimas semanas, los vecinos estuvieron muy activos en búsqueda de soluciones. Pero en ese camino se encuentran con otros obstáculos: “ayer estaba la Policía en la puerta de casa y se fueron, cuando tenemos que tener vigilancia las 24 horas. El jueves tuvimos una reunión vecinal en la Sociedad de Fomento Santa Rosa de Lima por la inseguridad. Ahí denunciamos con nombre y apellido a los delincuentes del barrio. El sábado, el patrullero se fue una hora y media y casualmente pasó por la puerta de casa uno de los que denuncié con nombre y apellido”, explicó Maite.
A pesar de ello, siguen insistiendo en encontrar respuestas. Por eso realizó una convocatoria pública: “el jueves a las 16 en la sociedad de fomento, en 234 entre Falucho y Gascón, nos vamos a reunir con todos los vecinos. El jueves pasado fue el irrespetuoso de Marcelo Fernández, de Asuntos de la Comunidad, que con palabras muy adornadas nos dijo lo mismo que el Comisario Rosso, que nosotros criábamos ladrones”. Con la insistencia en el concepto, para Campos la explicación es una sola: “es más fácil no hacerse cargo de la desinversión que hacen en los barrios, sin luminarias, sin cámaras de seguridad, sin infraestructura. Los chicos no estarían en la condición en la que están. Nuestro barrio es una zona impune”.
El jueves pasado acordaron un modo de trabajo que esta semana intentarán refrendar: “acordamos hacer dos comisiones, una para los asuntos de la comunidad propiamente dichos, como la poda, los baldíos, las luces, el agua que se estanca en los zanjones y demás. La otra será sólo para la inseguridad, así podemos informar a la gente cómo debe hacer la denuncia, qué sucede cuando llama al 911 y no acude”.
La escalada de delincuencia es realmente enorme y la ha sufrido todo el entorno de Martín Campos, incluso después del asesinato: “mi hermano en el barrio fue la cuarta víctima en tres meses. El martes le robaron a mi cuñada, la viuda de Martín. El viernes le robaron el auto al suegro de mi hermano. El sábado le hicieron un secuestro express a la abuela de mi marido. Este sábado la corrieron a mi suegra para robarle”.