Fue declarado culpable de abuso de poder, abuso criminal de confianza y lavado de dinero por recibir 9,4 millones de dólares de un fondo de desarrollo que él mismo creó poco después de asumir el poder en 2009.
El tribunal supremo de Malasia confirmó el martes la condena por corrupción del ex primer ministro Najib Razak y la sentencia a 12 años de prisión vinculada al saqueo del fondo estatal 1MDB. La pérdida de Najib en su apelación final significa que tendrá que comenzar a cumplir su sentencia de inmediato, convirtiéndose en el primer ex primer ministro en ser encarcelado.
El panel de cinco miembros del Tribunal Federal dijo que encontró unánimemente que el juez del tribunal superior tenía razón en su juicio y que la apelación de Najib estaba “desprovista de méritos”. El tribunal confirmó la condena y la sentencia de Najib.
1MDB era un fondo de desarrollo que el ex primer ministro creó poco después de asumir el poder en 2009. Los investigadores alegan que al menos 4.500 millones de dólares fueron robados del fondo y lavados por los asociados de Najib. Fue declarado culpable en 2020 de abuso de poder, abuso criminal de confianza y lavado de dinero por recibir ilegalmente 9,4 millones de dólares de SRC International, una antigua unidad de 1MDB.
Najib, de 69 años, ha sostenido que es inocente y ha estado en libertad bajo fianza en espera de sus apelaciones. Justo antes de que el tribunal emitiera su veredicto, se puso de pie en el banquillo para hacer una declaración en protesta por la negativa del tribunal superior la semana pasada de retrasar la apelación para permitir que sus abogados recién designados se prepararan para el caso.
El ex mandatario dijo que sentía que había sido “tratado injustamente” y que su caso se había acelerado. Señaló que un veredicto filtrado por el Tribunal Federal había sido publicado en un sitio web y dijo que si esto era cierto, sería un “juicio judicial”, mala conducta de primer orden”.
Pero la presidenta del Tribunal Supremo, Maimun Tuan Mat, dijo que las audiencias de apelación habían terminado porque los abogados de Najib se negaron a presentar nuevos argumentos para protestar por no tener más tiempo para prepararse. Luego leyó el veredicto de la corte.
Najib apareció en estado de shock. Inmediatamente se vio rodeado por su familia y simpatizantes.
El veredicto se produjo después de una serie de intentos del acusado de prolongar el caso.
El martes temprano, trató de sacar a Maimun del caso, citando un posible sesgo porque su esposo había hecho una publicación negativa en Facebook sobre su liderazgo poco después de su destitución en las elecciones generales de 2018. Pero los jueces desestimaron la solicitud de Najib.
Maimun, la primera mujer presidenta del Tribunal Supremo de Malasia que fue nombrada en 2019, ha sido atacada en las redes sociales por los partidarios de Najib. La policía arrestó a un hombre durante el fin de semana en relación con las amenazas de muerte contra Maimun. Cientos de seguidores del ex primer ministro se reunieron fuera de la cancha en una muestra de apoyo.
Además, Najib afronta otros tres juicios y decenas de cargos por este caso de corrupción del fondo soberano, que salpicó a exbanqueros de Goldman Sachs acusados de aceptar sobornos y blanquear miles de millones de dólares del 1MDB, según una investigación judicial en Estados Unidos.
Entre otras cosas, los antiguos empleados de Goldman Sachs financiaron la producción de películas de Hollywood como “The Wolf of Wall Street” y adquirieron joyas, inmuebles de lujo e incluso una pintura de Jean-Michael Basquiat por 51 millones de dólares.
El escándalo de 1MDB provocó investigaciones en los EE. UU. y en varios otros países y provocó la caída del gobierno de Najib en las elecciones de 2018. El acusado enfrenta un total de 42 cargos en cinco juicios separados vinculados a 1MDB, y su esposa también está siendo juzgada por cargos de corrupción.
Aún así, Najib sigue siendo políticamente influyente. Su Organización Nacional Malayos Unidos lidera el gobierno actual después de que las deserciones de los legisladores provocaran el colapso del gobierno reformista que ganó las elecciones de 2018.