La mitad de los argentinos tiene ingresos por debajo de los $ 8500 mensuales

Es la estimación que ayer publicó el Indec para el cuarto trimestre de 2016; para los ocupados de menores salarios se registró una leve mejoría; se mantiene la concentración.

En un país vapuleado por los precios de los alimentos y con una pobreza que alcanza a casi un tercio de sus habitantes, el Indec reveló ayer que la mitad de los argentinos -el instituto mide sobre 16 millones de habitantes con ingresos- sobrevive con menos de $ 8500 al mes, esto es, apenas superior al salario mínimo.
El instituto estadístico difundió ayer sus cuadros para el cuarto trimestre del año pasado sobre la distribución del ingreso en el pais. En base a esa información, afirmó, entre otras cosas, que más de 8 millones de los 16 millones de personas que perciben algún ingreso mensual no superan los $ 8500 cada fin de mes, aunque el promedio de toda la pirámide llegó hasta los 11.033 pesos.
La canasta básica total, que marca la línea de pobreza, estaba en diciembre pasado, según el instituto, en $ 4257. En marzo pasado, último dato publicado, fue de $ 4560.
Según el Indec, observando la población total según la escala de ingreso individual en el total de los aglomerados urbanos, el ingreso medio de esos 8 millones de personas fue a fines del año pasado de $ 7649.
En el primer decil, aquellos que menos ingresos reciben, se llega a los $ 1475 (se quedan con 1,3% de la torta total), mientras que en la otra punta de la pirámide alcanza los $ 33.461 (el decil 10 se queda con el 30,3% del total de los ingresos).
En un análisis de tendencia sobre uno de los primeros datos de la distribución del ingreso de la renovada Encuesta Permanente de Hogares (EPH), los especialistas consultados estimaron que los ingresos vinculados al empleo mostraron una leve mejoría.
Vale aclarar que sólo existen datos comparables para el año pasado, ya que según las nuevas autoridades del Indec, la EPH de la gestión de Guillermo Moreno no trabajaba con datos confiables.
“Un aspecto relevante es que la distribución del ingreso de la ocupación principal, es decir, los ingresos del empleo, mejoraron”, afirmó Jorge Colina, economista de Idesa. “Entre el segundo y el cuarto trimestre de 2016, el 40% de menor remuneración aumentó sus ingresos un 19%, el 40% que le sigue lo hizo en un 16% y el 20% de mayores remuneraciones sólo lo hizo en un 12%”, agregó.
Por caso, la mitad de los ocupados con ingresos (11,1 millones de personas, según el Indec) ganaban menos de $ 10.000 mensuales en el cuarto trimestre del año pasado, aunque el ingreso medio del decil intermedio (el quinto) apenas superó los $ 9000 por mes. La media del decil más alto llegó los $ 31.803, y la del más bajo, a 1640 pesos. El promedio total fue de 11.533 pesos.

Cautela

Los especialistas estimaron que este dato debe ser tomado con cautela, ya que existe evidencia de que, por diferentes razones (pudor, temor a la presión fiscal o inseguridad, entre otras) las personas subdeclaran sus ingresos a la EPH.
Sin embargo, el especialista de Idesa señaló que en la distribución de ingresos familiares per cápita, “que es lo que mide la desigualdad”, la situación del 20% de mayores ingresos mejoró respecto del 80% restante.
“Eso se debió a que las familias que se ubican en lo más alto de la pirámide tienden a ser no sólo las de mayores ingresos sino también las de tamaño más reducido”, sostuvo el especialista, y completó: “Esto señala, una vez más, que para mejorar la situación de los que menos tienen, tanto como mejorar sus ingresos, es tan importante inducir a una buena planificación familiar que asegure construir hogares financieramente sustentables”.
“Los datos socioeconómicos del cuarto trimestre de 2016 muestran una previsible mejora respecto de los del segundo y el tercero, pero que no logra compensar el deterioro registrado en el primer semestre de 2016”, afirmó Daniel Schteingart, investigador del Instituto Estadístico de los Trabajadores, dependiente de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (IET-UMET).
Según afirmó el especialista, en el último dato disponible de 2015 (sobre el que existen sospechas), el Coeficiente de Gini de ingresos en el segundo trimestre era de 0,409 (per cápita familiar). En el segundo trimestre de 2016 trepó a 0,428 y, tras tocar 0,438 en el tercero -si se elimina la estacionalidad del aguinaldo, que siempre incrementa la desigualdad-, volvió a bajar a 0,428 en el cuarto.

Claves de la distribución

La desigualdad

Los habitantes que más ingresos reciben se quedan con el 30,3% de la torta total. Mientras que aquellos que menos tienen reciben el 1,3 por ciento

Ingresos por habitante

La mitad de los argentinos viven con menos de $ 8500 mensuales. El promedio de la pirámide completa llegaba a los $ 11.033 en el cuarto trimestre de 2016

Los ocupados

La mitad de los que tienen trabajo (5,5 millones), tiene un salario por debajo de los $ 10.000. Para el promedio de todos los ocupados llega a $ 11.500

En las familias

En las familias más pobres, cada uno de sus integrantes tiene que vivir con un ingreso medio de $ 1470. En el promedio, este dato llega a 6688 pesos