El sargento del Ejército tailandés, identificado como Jakrapanth Thomma, estuvo atrincherado con rehenes durante horas hasta que escapó del edificio. Al menos otras 57 personas resultaron heridas.
Un sargento del Ejército tailandés ha matado a 27 personas y herido a otras 57 tras abrir fuego indiscriminadamente en las inmediaciones de un centro comercial de la ciudad de Nakhon Rachtasima (también conocida como Korat), en el noreste del país, este sábado.
La Policía de Tailandia ha acabado con la vida del militar, según ha confirmado el jefe de Policía, Chakthip Chaijinda, que ha informado de que dos agentes se encuentran entre las víctimas mortales, según ha recogido el diario local ‘The Nation’.
De los 57 heridos, 25 han podido ser dados de alta del hospital mientras que nueve tienen que someterse a diferentes operaciones, según han informado agentes policiales. Además, el primer ministro tailandés, Prayuth Chan Ocha, se dirige hacia la zona donde dará más información acerca de lo sucedido.
Un portavoz militar, el teniente general Kongcheep Tantrawanit, había confirmado 20 muertos a última hora de la tarde del sábado. En cuanto a los heridos, podrían ser 31, algunos de gravedad.
El individuo ha sido identificado como el sargento Jakkrapanth Thomma, de 32 años y quien, según las primeras investigaciones, robó armas y municiones de la base militar de Surathampithak, donde estaba destinado.
Allí mató a tiros a su comandante, a una civil y a otro soldado antes de robar un todoterreno acorazado modelo Humvee con el que hizo acto de presencia en el centro comercial Terminal 21.
El oficial asesinado ha sido identificado como el coronel Anantharot Krasae, con quien el sargento protagonizó una disputa previa. La civil fallecida parece ser un mujer de 63 años, familiar del coronel, posiblemente su suegra.
Posteriormente huyó a un templo budista donde mató o hirió a varios creyentes y después se desplazó hasta el centro comercial, donde abrió fuego indiscriminadamente en el aparcamiento y después se atrincheró dentro de la zona comercial de Nakhon Rachtasima.
Equipos de asalto del Ejército rodearon en la noche del sábado el centro comercial y las autoridades habían cortado calles y establecido un perímetro de seguridad de dos kilómetros alrededor de recinto para tratar de capturar al asaltante.
Una vez llegado al centro comercial, “el individuo usó una ametralladora y disparó a víctimas inocentes. Hay muchos muertos y heridos”, ha explicado el portavoz policial Krissana Pattanacharoen.
Tras horas de tensión, efectivos de las fuerzas de seguridad pudieron acercarse al lugar donde está el sospechoso y le instaron a entregarse, pero éste respondió con gritos y disparos. La operación sin embargo ha permitido evacuar a cientos de personas que estaban atrapadas en el centro comercial.
Según la reconstrucción preliminar de los hechos, a primeras horas de la tarde el asaltante disparó a su comandante y otros compañeros en una base militar a las afueras de la ciudad, para después robar armas y munición y darse a la fuga en un coche con el que se dirigió al centro de la urbe, que se encuentra a unos 250 kilómetros al noreste de Bangkok.
El militar, quien publicó fotografías y videos del ataque en las redes sociales, condujo hasta el recinto comercial donde al salir del coche comenzó a disparar con un rifle de asalto contra viandantes y automóviles.
Acto seguido, el soldado se adentró en el edificio donde continuó con los disparos, mientras centenares de personas huían despavoridas.
“No puedo levantar el dedo”, decía el tailandés, ataviado con uniforme militar y que también aseguró sentirse “cansado” y hablar de “rendirse”, en varias publicaciones colgadas en su perfil de Facebook, que más tarde sería desactivado.
También se ha registrado una explosión y un incendio, que según las informaciones preliminares se debería a la deflagración en la cantina del recinto de una bombona de gas a causa de los disparos.