La Justicia procesó a diez personas por delitos vinculados al contrabando. La organización se dedicaba a traer ropa de forma ilegal desde Buenos Aires, cuyo destino eran varias ferias de Montevideo.
Según se desprende del auto de procesamiento, la maniobra implicaba a más gente de la que finalmente fue detenida. Hay al menos tres personas más que siguen siendo buscadas por la Policía y, en algún caso, con participación protagónica en esta organización, dedicada al contrabando de ropas, concretamente desde la ciudad bonaerense de Avellaneda o la feria de La Salada.
Entre los procesados se encuentra un funcionario policial, que trabajaba en el destacamento policial de una zona del departamento de Soriano con costa sobre el río Uruguay, quien cobraba US$ 400 por cada pasaje de mercadería a través de la frontera.
Quien le entregaba ese dinero, a su vez, percibía entre US$ 500 y US$ 700, por pasada, aunque también tenía otras “tareas” dentro de la organización, como ayudar a descargar la mercadería. En ocasiones, también compraba ropa para revenderla en las ferias.
Cada uno de los involucrados en la banda de contrabandistas, se llevaba una importante cantidad de dinero, de acuerdo a su participación.
Por ejemplo, el encargado de un establecimiento rural que era utilizado como lugar para descarga de mercadería, cobraba entre $ 1.500 y $ 2.000 por cada una de las descargas.
Según declaró uno de los indagados, a la postre procesado, la organización “se encarga de hacer las compras en Argentina”, para luego dejar los bultos en una transportadora.
Esta transportadora llevaba la mercadería hasta la ciudad de Zárate, donde era recogida por un lanchero, quien trasladaba los paquetes hacia la costa y los cruzaba a Uruguay.
Ya en territorio nacional, el material se descargaba a un camión con zorra que luego llegaba a la capital y terminaba en manos de los feriantes.
Escuchas
El documento judicial, al que accedió El País, expresa que la investigación a esta banda de contrabandistas se inició el pasado 28 de febrero, mediante escuchas telefónicas, y tuvo su punto cúlmine el pasado 14 de agosto, cuando sobre las 11:30, a la altura del kilómetro 31,500, un equipo del Grupo de Respuesta e Inteligencia Aduanera (GRIA), detuvo a un camión Mercedes Benz de color gris y caja metalizada, donde se procedió a detener a dos personas, que viajaban a bordo.
Dentro de la caja del camión, los efectivos policiales encontraron 25 bultos “grandes y pesados” que, según consta en el auto de procesamiento, contenían un total de 6.597 prendas de vestir.
Detrás del camión, una camioneta Ford Eco Sport también fue detenida y su conductor arrestado, ya que pudo ser vinculado a la banda de contrabandistas.
Horas más tarde, ya en la Dirección Nacional de Aduanas, fue detenido otro individuo, que llegó al edificio, cuando las autoridades descargaban la mercadería.
Paralelamente, en Paysandú, se detuvo a otro individuo, quien según testimonios recogidos por la Policía, había facilitado la participación de dos vehículos: un auto marca Chevrolet Corsa y una camioneta Toyota Rav 4.
En total, la Policía detuvo a 13 personas que pasaron por la Justicia. Además, según la investigación que aún sigue, faltan por lo menos tres personas por indagar. Uno de ellos es el lanchero que ayudaba a trasladar la mercadería a través del río Uruguay, para que llegara a territorio nacional. También hay dos personas, que se dedicaban al transporte de las prendas en jurisdicción uruguaya.
Ocho de los procesados fueron a prisión por un delito de asociación para delinquir en concurrencia fuera de la reiteración con delitos de contrabando en régimen de reiteración real, en calidad de autores.
Otros dos procesados fueron a la cárcel por los mismos delitos, pero en calidad de coautores. La justicia decidió su procesamiento debido a la cantidad de mercadería incautada.