“La usurpación de terrenos nos preocupa mucho”

Juan Molinari, vecino del Barrio Alfar, habló con la 99.9 esta mañana para transmitir su preocupación por la usurpación de tierras en esa zona. “Nos preguntamos si dentro de la estructura provincial o municipal no existirá alguna red similar a la de Tránsito que se encargue de entregar información a cambio de dinero”, indicó, sobre las conjeturas de los vecinos. 

campos-usurpadosLos vecinos de la ciudad están muy preocupados por la usurpación de terrenos, que se ha convertido en una constante. Esta mañana en la 99.9 contó su experiencia Juan Molinari, vecino del Barrio Alfar.
En principio, aclaró que la usurpación “es un tema que a los vecinos del Alfar nos preocupa muchísimo”. Luego, abundó: “nos da la sensación de que es una dinámica que se está verificando en toda la ciudad. Hace unos días se desbarató la banda que actuaba desde adentro del estamento municipal; está muy bien, pero si uno se pone a pensar, hay ilícitos que no se podrían cometer desde adentro de una estructura de gobierno ya sea por apoyo, acceso a cierta información y demás”.
Si bien no son jueces ni fiscales, los vecinos entienden que hay alguna ayuda “desde adentro” para que se puedan ocupar las tierras sin mayores inconvenientes: “nos parece que para ocupar un lote de modo irregular, provisto de alguna documentación de origen dudoso, es necesario manejar alguna información: si el lote debe impuestos, si hay herederos del original propietario… Son preguntas que nos hacemos como vecinos”.
“Nos preguntamos si dentro de la estructura provincial o municipal no existirá alguna red similar a la Tránsito que se encargue de entregar información a cambio de dinero. Hace falta todo un equipo, esto no lo puede hacer solo una persona”, manifestó Juan.
Sin dudas, estos tópicos actúan como disparadores: “ésta es la Mar del Plata oculta que un día sale a la luz, donde unos pocos hacen un negocio a expensas de todos los demás”.
De todas maneras, hoy la preocupación pasa por el estado del Barrio Alfar, donde los vecinos no encuentran soluciones ni respuestas ante la usurpación: “el barrio era una cosa completamente distinta. Por la calle donde pasa el colectivo antes había un montón de baldíos y hoy te encontrás toda las tierras cercadas con alambraditos o cuerdas. Son personas que se empiezan a apropiar de lo que no es propio. Además, está la inseguridad que transformó el barrio en algo totalmente desconocido para los que nos hemos criado allí”.
Mientras siguen esperando que algún político o la justicia accionen para detener el flagelo de la usurpación, las medidas inmediatas quedan en manos de los propios vecinos: “antes, los ciudadanos expresábamos preocupación y los políticos actuaban, ahora es el revés. Los políticos muestran preocupación en los medios y los vecinos tenemos que actuar”.