Luego anunciar el lanzamiento de un cohete con un mono a bordo, Irán afirmó que en ocho meses pondrá en órbita el satélite Zafar, el cuarto de su historia. Occidente teme que, en el futuro, estos cohetes podrían armarse con cabezas nucleares.
El nuevo cohete que Irán pretende llevar al espacio se denomina Zafar, término que en farsi significa “triunfo”. Será tres veces más preciso que el anterior satélite, llamado Navid. Su objetivo es obtener imágenes de gran resolución para la elaboración de mapas.
Saeed Jabal-Ameli, responsable de la Universidad de Ciencia y Tecnología, explicó que se trata de un satélite elaborado al 100 por ciento dentro del país.
A pesar de haber sido sancionado por su programa nuclear, Irán no detuvo su actividad de enriquecimiento de uranio. Además, reforzó la investigación espacial y su capacidad balística. Por tal motivo, la portavoz del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Victoria Nuland, mostró su preocupación por el desarrollo de misiles por parte de Irán. También manifestó sus sospechas de que los satélites puedan ser armados con bombas nucleares.
El presidente iraní Mahmoud Ahmadineyad había dicho que en el año 2024 se enviaría un hombre al espacio, pero debido a los avances logrados en los últimos tres años, la fecha se adelantó para el 2019. Vale recordar que Irán lanzó su primer satélite en 2009 y es uno de los diez países del mundo con esta capacidad.