Dicen que hoy no son competitivas; respaldan la política oficial, pero exigen un alivio en la carga impositiva y cambios en logística e infraestructura; para la mayoría, Brasil tocó fondo y crecerá.
Steve St. Angelo, CEO de Toyota para América latina, fue el encargado de hacer el anuncio. Luego de la rebaja de aranceles a la importación para los autos híbridos y eléctricos presentada semanas atrás por el Gobierno, la marca japonesa anunció que el Prius -un auto híbrido que ya se vende en el país- pasaría de costar 62.000 a 38.900 dólares, un descuento de casi 40 por ciento.
En la antesala de la apertura del octavo Salón de Automóvil y nada menos que a través de una señal de precios, la empresa pareció enviar un respaldo a la actual política oficial para el sector. También una respuesta -implícita- a los dichos de la ex presidenta Cristina Kirchner, que días atrás, en una entrevista televisiva, había afirmado que nunca una rebaja de impuestos a las empresas había repercutido en los precios a los consumidores.
Pero aun así, el Toyota Prius seguirá costando más (entre US$ 10.000 y 15.000) en la Argentina que en Europa y los Estados Unidos. Esta situación es también una metáfora de que, no sólo para Toyota, sino para la mayoría de los actores del sector, se precisa una mejora de competitividad para impulsar precios más bajos para el mercado interno pero también para alcanzar otros mercados más allá de Brasil, país que para todos los consultados ayer por LA NACION mostrará este año mejoras muy tibias y en cámara lenta.
“Apreciamos mucho lo que el actual Gobierno hizo hasta ahora”, afirmó luego St. Angelo en una charla con LA NACION. “Con la tecnología híbrida y eléctrica se está preparando al país para el mañana, pero la cuestión fundamental son los costos”, explicó el ejecutivo regional. Pese a que Toyota mejoró la exportación de la Hilux que se hace en Zárate, aún hoy la mayoría de los países la compran en Tailandia. La automotriz anunció además que traerá su modelo Innova a la Argentina.
“Hoy obviamente no somos competitivos”, estimó, por su parte, Carlos Gomes, presidente regional del Grupo PSA (Peugeot-Citröen). “Nos golpean la energía y la logística. Transportar un auto de Buenos Aires a Chile cuesta más que traerlo de Africa. Hoy por hoy, los coches tienen impuestos a la producción y eso penaliza la exportación”, agregó el ejecutivo brasileño, que indicó que se encuentra “bastante seducido” por lo que ha visto en el último año y medio. La marca francesa presentará hoy en el Salón los Peugeot 3008 y 5008, y el Citroën C4 Cactus.
“Hay un enorme problema de competitividad”, afirmó Carlos Zarlenga, CEO de General Motors en la Argentina y Brasil. “Veo voluntad en los dos países para una apertura. Es una oportunidad para generar eficiencia e invertir”, dijo. Y para eso pidió trabajar en una reforma laboral (citó como ejemplo la de Brasil), trabajar los impuestos y alinear la burocracia entre ambos países. Para Zarlenga, Brasil empezó el año mal pero en el segundo trimestre comenzó a mostrar un leve crecimiento y espera un mercado de 2,2 millones de autos. “Las ideas [del gobierno argentino] son buenas y bienvenidas. Lo importante ahora es trabajar”, dijo con relación al Plan Un Millón. “El Gobierno tiene que apoyar el crecimiento del sector. Hoy es el momento de ahondar y profundizar ese acuerdo”, afirmó.
“Brasil está estancado a niveles bajísimos y, cuando ves una suba, decís ¡Guau!, pero es una suba de 10% de casi nada. La industria local depende entre el 60% y 80% de Brasil. Si ese país no se recupera, la industria local va a estar muy baja”, anticipó Cristiano Rattazzi. presidente de FCA (Fiat Chrysler Automobile). “Para exportar necesitamos cambiar el sistema impositivo argentino, que es una tragedia, e ir a una situación de un país con menor inflación, menos déficit y pobres. Hay un dólar retrasado, baja competitividad e impuestos enormes”, señaló, y pidió eliminar Ingresos Brutos y el impuesto al cheque. FCA presentará los modelos Argo, Tipo, 124, 500X y jeep Compass. Estos mismos problemas mencionados por los ejecutivos de la industria son similares a los que fueron mencionados en dos entrevistas publicadas ayer en LA NACION a Pablo Di Sí, presidente de Volkswagen, y a Enrique Alemañy, número uno de Ford en el país.
La palabra de los números uno
José Luis Valls – Ceo de Nissan en América latina
“Tenemos que ser competitivos. No hay que pensar en producir sólo para la Argentina.El sector público tiene que hacer sus inversiones en infraestructura y logística, y no cambiar reglas”
Olivier Murguet – Director de Renault en América
“El Gobierno hizo una ley para ayudar a la mayor integración. Nosotros tenemos nuevos proyectos. Todos tienen que hacer lo suyo en cuanto a competitividad. Hay viento a favor”