Según el comandante de bomberos, dos de las víctimas eran mujeres. Por otra parte, el ministro de Defensa anunció que desplegará 1.500 efectivos militares más para controlar la situación de disturbios violentos que vive la capital chilena.
Tres personas murieron en un incendio al interior de un supermercado que era saqueado la madrugada de este domingo en Santiago, en medio de los graves disturbios que se registran desde hace dos días, informó la intendenta (gobernadora) de la capital chilena, Karla Rubilar.
“Tenemos que informar que hay tres personas fallecidas en un incendio en un supermercado. Dos estaban calcinadas y la tercera fue trasladada a un hospital en malas condiciones pero posteriormente murió”, afirmó Rubilar a la prensa.
El hecho ocurrió en un enorme supermercado Líder, controlado por la cadena minorista estadounidense Walmart, en la comuna de San Bernardo -al sur de Santiago- donde se produjo un incendio luego de que centenares de personas forzaron los ingresos para saquear el lugar y que huyeron despavoridas por las llamas, informó, por su parte, Marcos Echeverría, jefe de bomberos de la zona.
Son las tres primeras víctimas de los graves desórdenes que se han registrado desde hace dos días en Santiago a causa del alza de la tarifa del metro de la capital chilena decretada por el gobierno, decisión que el presidente Sebastián Piñera suspendió durante el sábado. Dos de las víctimas eran mujeres.
La violencia llevó al mandatario a decretar toque de queda en Santiago y la medida se extendió a la región de Valparaíso (centro) y la provincia de Concepción (sur) mientras que se ordenó estado de emergencia en la región de Coquimbo (norte), zonas a donde se han extendido los hechos de violencia.
El ministro e Defensa de Chile, Alberto Espina, anunció que desplegará en la madrugada de este domingo a 1.500 efectivos militares más para controlar la situación de disturbios violentos que vive la ciudad desde el viernes.
Con este incremento, serán un total de 9.441 integrantes de las Fuerzas Armadas los que están desplegados en la Región Metropolitana para salvaguardar algunos lugares estratégicos y para sumarse al patrullaje.
La presencia de militares se da desde que en la madrugada del sábado el presidente del país, Sebastián Piñera, decretara el estado de emergencia para la provincia de Santiago y dos comunas aledañas, otorgando su control el Ejército. Medida a la que el domingo se sumó el toque de queda hasta las 7:00 de la mañana (10:00 GMT).
“Los niveles de violencia y saqueos han llegado a extremos que difícilmente hemos visto antes en nuestro país. Por eso se aumentaran en 1.500 los integrantes del Ejército de Chile a contar en esta madrugada”, dijo a la prensa Espina, acompañado por el ministro del Interior, Andrés Chadwick; y la intendenta de la Región Metropolitana, Karla Rubilar.
El titular de Defensa explicó que los efectivos militares se encuentran protegiendo “43 instalaciones de infraestructura crítica para que no se interrumpan los suministros de agua ni luz eléctrica, ni se violenten las plantas de combustible y gas.
UN VANDALISMO NUNCA ANTES VISTO
Por su parte, el ministro Chadwick dijo que el país se encuentra ante una acción vandalismo que no habían conocido ni visto nunca antes de esta manera, pero “se han tomado y se seguirán tomando” todas las medidas necesarias para poder tomar el control del orden público.
El ministro del Interior adelantó que pese a los estados de emergencia ya declarados para Santiago de Chile, Valparaíso (centro) y Concepción (sur), se va a sumar la norteña región de Coquimbo, donde las ciudades de Coquimbo y La Serena se vieron muy afectadas este domingo por actos violentos y fuertes incendios.
“Quisiera hacer un llamado a todos los ciudadanos de todo el país a cuidar la tranquilidad y el orden. Sería una gran lección para este grupo de vándalos que toda la ciudadanía que queremos vivir en tranquilidad, en orden y en paz, colaboráramos para aislar y acorralar a esos grupos vandálicos y que las fuerzas policiales y amadas puedan controlar esta situación”, expresó Chadwick.
El alza del precio del metro fue el detonante de una protesta ciudadana para expresar el descontento ante la carestía de la vida en Chile y las desigualdades del país, que estalló este sábado en una batalla campal en varios puntos de la capital y en otras zonas del país, con barricadas, incendios y saqueos.