La primera impresora 3D fue producida en el año de 1992, desde entonces la tecnología ha logrado un avance casi inimaginable.
Uno de los ámbitos donde la impresión 3D está teniendo un gran impacto es en el de la salud.
La capacidad para producir implantes personalizados y dispositivos médicos adaptados específicamente para la anatomía de un paciente ha visto abrir todo tipo de posibilidades en el campo de la medicina.
BBC Mundo hace un repaso de algunos de los procedimientos más significativos, que cambiaron la vida de algunas personas.
Implantan cráneo completo
En marzo de 2014, una mujer holandesa de 22 años, se convirtió en la primera persona del mundo en recibir una prótesis completa de cráneo elaborada con una impresora 3D.
La operación se hizo necesaria luego de que se le detectara una rara enfermedad que comprimía progresivamente su cerebro.
La paciente sufría graves dolores de cabeza, ya que su cráneo se había engrosado cerca de 5 cm y causaba la presión cerebral.
La cirugía fue realizada en el Hospital Universitario de Utrecht, Holanda, por un equipo a cargo del neurocirujano Bon Verweij.
Durante 23 horas aproximadamente buscaron evitar la progresión del trastorno y que se viera afectada la capacidad cerebral de la joven o se deformara su rostro.
Tras esperar unos meses los resultados logrados por la operación, el equipo médico afirmó que la intervención fue exitosa, logrando que la mujer recuperara las capacidades perdidas e incluso pudiera reintegrarse a su trabajo.
Salvan a bebé con impresión de corazón
En Washington, Estados Unidos, un bebé de sólo 14 meses tuvo una segunda oportunidad de vida luego de que médicos de la clínica Kosair Childrens Hospital, especializada en el tratamiento de afecciones cardíacas, usaron una copia de su corazón impreso en 3D para facilitar el tratamiento necesario.
Esto después de que el médico determinara que el corazón de Roland Lian se encontraba con graves defectos, por lo que era necesario operarlo.
El cirujano Erie Austin decidió recurrir a la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Louisville para plantearles su proyecto, por lo que con ayuda de la Facultad, se logró reproducir el corazón del niño en un tamaño que duplicaba el órgano original, con lo que se pudo determinar las afecciones exactas del menor.
La impresión 3D mostró que Roland había nacido con un agujero en el corazón, así como con deformaciones en la aorta y en la arteria pulmonar, gracias a ello, al momento de la operación no se perdió tiempo y la cirugía pediátrica fue un éxito.
Desarrollan brazo biónico para niño de seis años
Un grupo de estudiantes de ingeniería aeroespacial de la Universidad de Florida Central desarrolló un nuevo brazo biónico con una impresora 3D para que el niño de seis años de edad, Alex Pring, pudiera tener plena movilidad en su brazo derecho y realizar las tareas propias de un niño de su edad.
El costo del brazo fue de US$350 dólares, después de que médicos informaran a la familia del niño que costaría US$40.000.
Los estudiantes fueron capaces de mantener los costos bajos, ya que las partes como el antebrazo se pueden imprimir por menos de US$50 y una mano por tan sólo US$20.
El trabajo rápido del equipo significó que Alex fue capaz de dar a su madre un abrazo con ambas extremidades, la primera vez que lo ha hizo en su vida.
Implantan la primera vertebra hecha por impresora 3D
Médicos del Hospital de la Universidad de Pekín realizaron el primer implante de una vértebra creada con una impresora 3D, en un niño de 12 años que había desarrollado cáncer en los huesos.
El trasplante de vértebra fue realizado con un sustituto de material plástico, hecho de titanio y diseñado para imitar el hueso original.
Este tipo de trasplantes tienen un valor elevado, por lo que al realizar la pieza con una impresora 3D los costos se reducen considerablemente; otra de las ventajas se refleja en el período de recuperación postoperatoria, ya que es más rápida debido a que el elemento implantado se hace a la medida exacta de los requerimientos del paciente.