Antequera, de 32 años, había sido condenado por robar autos en la provincia de Buenos Aires. Facebook trucho y hermano policía.
El ladrón que se tiroteó con los policías en el microcentro porteño cayó por tercera vez en los últimos diez años. Esta vez, robó una joyería, intercambió 40 disparos con uniformados y terminó herido con una bala en el tórax. El hombre, de 32 años, había salido sólo tres meses atrás de la cárcel.
Se trata de Carlos Alberto Antequera, aunque no siempre se llamó así. La primera vez que fue detenido, según pudo saber TN.com.ar, juró que era Sergio Hernán Baffetti. Así, de hecho, ingresó el 14 de julio de 2009 a la Unidad 1 de Olmos por robar un auto. Su DNI lo terminó por delatar. Luego fue trasladado a la Unidad 42 de Florencio Varela.
El Juzgado de Ejecución 2 de San Martín lo condenó a 5 años y 10 meses de prisión, según el Registro de Reincidencia de la provincia de Buenos Aires. El 24 de diciembre de 2013 recuperó por primera vez la libertad.
Los Antequera viven en la localidad de Villa Maipú, partido de San Martín. Su familia es humilde y numerosa. Tiene cuatro hijos. Su hermana es beneficiaria de dos planes de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses): la Asignación Universal por Hijo (AUH) y el Hogares con Garrafas.
Su hermano, de 29 años, está del otro lado de la calle: ingresó en 2015 a la Policía Local de San Martín. Pero mientras su hermano se recibía como uniformado, él aumentaba su prontuario.
No tardó mucho en volver a caer: el 24 de febrero de 2015, también por robar un auto con una ganzúa en La Matanza. Esa vez declaró que se llamaba Carlos Edgardo Antequera Sánchez. Pasó por las unidades 23 de Florencio Varela, 41 de Campana y 43 de La Matanza.
En la cárcel de Florencio Varela protagonizó una pelea con otro interno, según el informe médico del 9 de enero de 2017. Terminó con dos cuchillazos, aunque leves, en la pierna derecha. Una vez lo sancionaron por tenencia de pastillas prohibidas en la celda.
Recuperó por segunda vez la libertad el 6 de noviembre del año pasado. Tres meses después, en pleno centro porteño, robó en “Yoni”, una joyería ubicada en la calle Libertad, casi esquina con Corrientes. En medio de la fuga fallida, por el intercambio de disparos, terminaron heridos la jueza en lo Laboral 63 porteña, María Alejandra D’Agnillo, y uno de sus empleados, Ezequiel Allende, que fueron trasladados al Hospital Ramos Mejía.