Teresa, hermana de Damián Sepúlveda, el joven asesinado en una comisaría de General Madariaga habló en la 99.9 sobre una pericia que fue determinante para la culpabilidad de los policías. “Esa noche había 12 efectivos policiales y quedaron procesados por tortura seguida de muerte”, puntualizó.
La muerte de Damián Sepúlveda en una comisaría de General Madariaga, fue un hecho que en su momento, causó mucha repercusión. Con el correr del tiempo, el tema se fue diluyendo para la opinión pública, pero no para la familia de la víctima.
En las últimas horas, las pericias les han dado la razón a los familiares que siguieron con su lucha asegurando que a Damián lo habían matado. Su hermana, Teresa, indicó en la 99.9 que “la pericia de Gendarmería era lo que faltaba para saber que había pasado. Por suerte arrojó un resultado positivo para la familia porque está detallado como fue brutalmente golpeado mi hermano hasta la muerte”.
Este resultado deja implicado a los policías que ese día estaban de turno en la comisaría y sobre quienes, ahora, cae el peso de la culpabilidad. “Esa noche había 12 efectivos policiales, de los cuáles 3 estuvieron a disponibilidad 120 días pero como no había nada en concreto fueron puestos a trabajar nuevamente. Ahora los 12 policías están procesados por tortura seguida de muerte”, destacó Teresa.
Ha pasado mucho tiempo desde el hecho, sin embargo la intención de la familia de empujar la causa para que no quede estancada hoy tiene sus frutos. “Ya han pasado 2 años y 7 meses. Tratamos de ayudar a la justicia para que la causa no quede parada”, insistió.
Teresa también es policía, pero desde aquella fatídica noche en Madariaga, ya no puede cumplir tareas en la calle. “Sigo en la fuerza haciendo tareas administrativas porque no me siento capacitada para volver a la calle y portar el arma. Estoy haciendo trabajos que no tienen que ver con detenidos y hechos policiales”, dijo.
Mientras tanto, se deben esperar otras medidas judiciales para encontrar indicios más puntuales sobre los autores de la golpiza. “Los policías están en libertad ahora. Nosotros estamos pidiéndole a la justicia que tomen las medidas necesarias para que no se vayan del país y sea complicado a la hora del juicio. Ahora pedimos que se les extraiga sangre porque en la remera de mi hermano había un ADN que no era de él”, finalizó.