La marea registró 50 centímetros de baja, lo cual dificultó la navegación por los canales internos de la laguna y, en algunos casos, incluso impidió el paso de embarcaciones y del transporte de mercancías.
Tras las devastadoras inundaciones de los pasados noviembre y diciembre, para Venecia y sus habitantes volvieron los inconvenientes. Esta vez, sin embargo, por el problema opuesto: muchos canales de la ciudad italiana están sin agua debido a una marea excepcionalmente baja, un evento contrario a la acqua alta del 12 de noviembre de 2019 que tocó los 187 centímetros y puso de rodillas a la ciudad.
Este jueves 9 de enero, la marea registró 50 centímetros de baja, lo cual dificultó la navegación por los canales internos de la laguna y, en algunos casos, incluso impidió el paso de embarcaciones y el transporte de mercancías.
Marea baja
El fenómeno, también conocido como secche della Befana (“sequías de la Befana”, porque ocurre cerca del 6 de enero, cuando en Italia se celebra “la Befana”), está afectando los distritos de San Polo y Santa Croce, creando algunos problemas para los gondolieri, para los servicios de emergencia y los bomberos. Sin embargo, no hay dificultades a lo largo de los principales canales.
Enero es un mes de baja presión y esto implica menos aguas altas (el pico máximo de estos días ha sido 60) e incluso algunas mareas bajas.
El fenómeno
Este suceso volvió a poner sobre la mesa la cuestión del mantenimiento de los canales, a través de la excavación que se ha discutido durante años. El sistema prevé el cierre de los canales por un tiempo limitado para sacar el agua y eliminar el lodo. Sin embargo, la falta de fondos no lo permite.