Las protestas contra el gobierno de Nicolás Maduro y la crisis económica y de inseguridad que vive Venezuela se han prolongado durante estos días.
El líder opositor venezolano Leopoldo López, contra quien fue emitida una orden de captura por los hechos del 12 de febrero, que dejaron tres muertos y decenas de detenidos, convocó a una nueva marcha para hoy a través de un video publicado en su cuenta oficial de Twitter.
En el video, López dice que llevarán pruebas de lo ocurrido y peticiones muy concretas, como que se aclaren los hechos violentos de la semana pasada y se libere a los ciudadanos que permanecen detenidos desde entonces.
López, el político más visible de la ola de protestas, no ha aparecido en público desde que se emitió la orden de captura el jueves 13 de febrero.
En una cadena de radio y televisión, momentos después, Maduro insistió en que las protestas recientes “buscan una intervención de Estados Unidos” y pidió a sus seguidores que sigan “defendiendo los ideales de la patria”. Además, expulsó del país a tres oficiales consulares estadounidenses aún no identificados, acusados de trabajar con la oposición venezolana “en un intento de golpe de Estado”.
El domingo por la mañana, el gobernador del estado Miranda, Enrique Capriles, denunció la represión contra los manifestantes y anunció nuevas convocatorias a protestas contra “el paramilitarismo y la violencia”, sin dar más detalles.
Las protestas contra el gobierno venezolano se mantienen en varias partes de Caracas y del país, como en Guayana, donde se reportaron lanzamientos de gases lacrimógenos. “No tengo nada que temer, no he cometido ningún delito. Allí estaré para asumir esa persecución y esa decisión infame por parte del estado”, dijo López.
Capriles, por su parte, defendió a López y a la también opositora María Corina Machado diciendo que convocar a un manifestación pacífica no es ningún delito y que eso no los hace culpables de ningún hecho violento. “Su responsabilidad tendrá que demostrarse”, señaló. El excandidato presidencial también explicó sus diferencias con López y Machado: “una cosa es protestar por los problemas de los venezolanos y otra decirle a la gente ‘salga a la calle a ver qué pasa’. Si no nos proponemos objetivos claros, le vamos a producir más frustración a la gente”.
Aunque las principales marchas, tanto a favor como en contra del gobierno, fueron en Caracas, también hubo movimiento en otras ciudades, como Maracaibo, Valencia, Puerto La Cruz, Mérida, Barquisimeto y San Cristóbal. Durante la jornada también se realizaron protestas en el exterior, en países como España, Estados Unidos y Panamá.