El Director de Tránsito de General Pueyrredón, Miguel Grassi Muñoz, habló en la 99.9 sobre los operativos instructivos en las rotondas para los conductores tratando de ordenar la circulación en las mismas y destacó la necesidad de eliminarlas en un futuro: “habría que ir eliminandolas de a una para ver como circulan los vehículos”, resaltó. También anticipó que están tratando de implementar los controles de narcolemia.
La Dirección de Tránsito de Mar del Plata decidió ir directamente a las rotondas a explicarle a los conductores como deben ingresar y salir de las mismas para organizar mejor la circulación. En la 99.9, el director del área, Miguel Grassi Muñoz explicó que “en todas las rotondas es complejo ingresar y salir sobre todo en horarios pico. Ahora se complicará más a las 8 de la mañana cuando comience el ciclo lectivo”.
En cuanto a la tarea que realizaron puntualizó que “el que ingresa a la rotonda tiene que frenar y quien está circulando para salir, debe pasar. Hemos puesto inspectores de tránsito para indicar donde tienen que frenar y nos ha dado muy buenos resultados”.
Por ahora, se trata de una medida de prevención, pero el funcionario del gobierno municipal explicó que lo mejor sería la eliminación de las rotondas: “creemos que sería lo justo. Al menos ir eliminandolas de a una para ver como circulan los vehículos. Los carriles centrales de la avenida Champagnat habría que achicarlos un poquito porque ganaríamos una mano más de tránsito. Si se podrían eliminar, sería mejor”.
La utilización de los semáforos en esos cruces, podría alivianar la circulación porque “con el crecimiento del parque automotor, se hacen embudos donde no pasa nadie. Es un tema que tenemos que trabajar con la Provincia, por lo tanto, lo intentaremos”, puntualizó Grassi Muñoz.
También habló sobre otro de los temas que eran motivo de preocupación en los primeros días del año: los alcoholímetros. Después de que llegaran los elementos necesario, detalló la tarea que están realizando sobre todo con la implementación de los controles cuando las personas van a retirar los autos secuestrados: “lo empezamos a hacer a los dos días que nos trajeron los alcoholímetros. En el área de estacionamiento medido hemos dejado uno y en la playa de secuestro al momento de entregar el auto, se le hace un test a modo de precaución”.
Con los elementos a disposición, no sólo se limitan a los controles por la noche, sino que hacen su labor durante las 24 horas: “a raíz de la llegada de los alcoholímetros, no sólo estamos trabajando con los megaoperativos nocturnos, sino que están distribuidos en las dependencias y estamos haciéndolos todo el día”, destacó.
Por último, Grassi Muñoz indicó están tratando de interiorizarse sobre la posibilidad de, al igual que Bahía Blanca y Rosario, empezar a implementar los test de narcolemia: “estamos tratando de hacer algo parecido para trabajar con la narcolemia. Nos vendría bien y sería una manera más de prevenir accidentes”, finalizó.