El concepto que presentó una empresa norteamericana permitirá viajar a 6.000 km/h, aunque recién se empezarían a usar en 20 o 30 años.
De Europa a Australia en cinco horas, de Los Ángeles a Tokio en tres o de Londres a Nueva York en menos de dos. ¿Es el anuncio que hizo Carlos Saúl Menem en los 90? No: en el Foro-Exposición del American Institute of Aeronautics Aviation, se presentó un prototipo de avión hipersónico que podría volar a 6.000 kilómetros por hora.
El primer concepto hipersónico de transporte de pasajeros de la empresa Boeing podrá tener aplicaciones militares y comerciales, explicó la compañía, aunque los vuelos turísitcos recién serían posibles en 20 o 30 años.
“Es un concepto que un día podría redefinir la aviación y conectar el mundo más rápido que nunca antes”, escribió en su cuenta de Twitter el CEO de la compañía, Dennis A. Muilenburg.
Lo que todavía no se sabe es cómo se construirán estos aviones para que alcancen la velocidad suficiente, aunque los especialistas hablan de materiales más ligeros para el fuselaje y nuevos motores. La otra pregunta clave es: ¿Los pasajes tendrán un precio razonable para que los aviones sean rentables?
Más allá de la velocidad del sonido
El concepto hipersónico se refiere a un vehículo que puede volar a Mach 5, o sea cinco veces la velocidad del sonido, el siguiente nivel de velocidad por encima de la velocidad supersónica. Para compararlo con algo que todos conozcamos, el famoso Concorde, que unía Nueva York y Londres en tres horas y media, volaba a Mach 2.02.
Este año, un Boeing 787-Dreamliner de la aerolínea Norwegian logró el récord de vuelo trásatlántico más veloz, para un avión subsónico. El 15 de enero unió la capital inglesa con “la gran manzana” estadounidense en 5 horas y 13 minutos, a una velocidad de 1.248 kilómetros por hora.