En el período 2012-2013, los casos de acoso escolar denunciados en Japón llegaron a un récord de 198.108, casi el triple comparado con los casi 70 mil del año anterior.
Se trata de la cifra más alta desde 1985, según un informe del Ministerio de Educación divulgado por la televisión pública NHK y citado por la agencia española de noticias EFE.
El ministerio atribuyó este incremento al esfuerzo realizado por los colegios para detectar y denunciar los casos de acoso escolar o bullying. En todo Japón, hay 22.272 colegios de primaria, secundaria y bachillerato. Entre ellos, el 57,3% de todas las instituciones sondeadas informaron de casos de bullying.
“De esos centros, el 53,2% localizó los abusos a través de encuestas a estudiantes, uno de los métodos de detección cuyo uso los colegios comenzaron a potenciar”, indicó el ministerio.
Por primera vez, el informe del pasado curso también brindó el número de casos que fueron denunciados a la policía: un 0,5% del total.
En Japón, el bullying ha llevado a los estudiantes al suicidio cada año, situación que muchas veces tiene que ver con los miles de casos de abandono escolar que se registran en el país. Según el informe, un total de 196 estudiantes se quitaron la vida durante el año escolar y seis de esos suicidios podrían estar directamente relacionados con al acoso de los mismos compañeros de estudio.
Además, 112.689 alumnos de primaria y secundaria dejaron la escuela, mientras que en bachillerato abandonaron los estudios 57.664. El informe también destaca que los casos de abandono escolar reportados en las prefecturas de las ciudades de Miyagi y Fukushima, dos de las más afectadas por el tsunami y el accidente nuclear de 2011, superaron la media nacional.