Los contratos de exportación representan la mitad de los ingresos de la empresa estatal rionegrina. Cerró el balance 2018/2019 con ganancia. Vende tecnología a empresas y gobiernos de Holanda, Arabia Saudita, India, Argelia, Brasil y Bolivia. Con Turquía desarrolla un minisatélite.
La mitad de la tecnología que la empresa estatal Invap desarrolló y vendió en su último año corresponde a exportaciones. Esto le permitió bajar la dependencia de los contratos con organismos estatales y, a la vez, eludir parte del impacto de la devaluación en el pago de sus insumos. La compañía, que en los 12 meses que van desde julio de 2018 hasta junio de este año, tuvo ventas por casi 7.500 millones de pesos, acaba de aprobar un balance con resultado positivo.
Hace 43 años que Invap viene manejándose entre contratos con privados, esencialmente en el exterior, y acuerdos con el sector estatal, ya sea en materia nuclear, aeroespacial o defensa. Pero durante los 12 años del kirchnerismo alcanzó su máximo desarrollo y sus máximas figuras gerenciales quedaron ligadas a la imagen de ese gobierno, lo que le costó algunos cortocircuitos con la administración de Mauricio Macri en sus inicios.
Rápidamente la empresa (cuyo núcleo duro de conducción cambió sólo por cuestiones jubilatorias en sus cuatro décadas) dio un golpe de timón y buscó fortalezas en el nuevo gobierno.
Compensó la suspensión del plan satelital con contratos en materia nuclear en Brasil, Bolivia y Holanda. La salida del default le permitió acceso a cierto tipo de financiamiento.
El gerente general de la empresa, Vicente Campenni, le dijo a “Río Negro” que el resultado económico del ejercicio que acaban de cerrar es positivo, aunque eso no significa que Invap tenga un flujo de recursos holgado.
“Tenemos ingresos en dólares, pero también proveedores con precios en dólares, incluidos algunos de Argentina”, advirtió Campenni.
Las nuevas medidas restrictivas del gobierno nacional en materia cambiaria obligan a los exportadores a liquidar las divisas que ingresan al país en un plazo de cinco días hábiles. Invap no puede entonces retener los dólares para previsionar sus pagos y debe calzar la percepción con el desembolso.
Nuevo gobierno
“Invap apuesta a políticas de Estado. Necesitamos trabajar con todos los actores políticos”, dijo el gerente general de la empresa cuando se lo consultó sobre las expectativas frente al nuevo gobierno de Alberto Fernández. Campenni dijo que no tuvieron contacto con el presidente electo.
Por ahora, en materia nuclear la empresa mantiene contratos de exportación de tecnología con:
•Arabia Saudita (reactor de investigación de baja potencia).
•Argelia (modernización del reactor NUR, construcción de una planta de radioisótopos y ampliación de la planta de producción de combustibles).
•India, (construcción y puesta en marcha de una planta de radioisótopos).
•Holanda (un reactor de investigación).
•Brasil (ingeniería de detalle del Reactor Multipropósito Brasileño, RMB).
•Bolivia (tres centros de radioterapia).
Hay además un contrato con la empresa Turkish Aerospace, de Turquía, para el desarrollo de un satélite de comunicaciones llamado MiniGeo, para salir a venderlo a través de una sociedad conjunta llamada Gsatcom. Este proyecto cuesta 60 millones de dólares, cuyo financiamiento fue obtenido por los turcos.