El abogado Julio Razona se refirió en la 99.9 a los casos de corrupción con los cuáles se encontró en su breve paso como funcionario municipal en el área de Seguridad: “las leyes están hechas para cumplirlas, vivimos en un estado de inseguridad por no cumplir las leyes”, señaló.
Después de haber renunciado a su cargo en la función pública, el Dr. Julio Razona reclamó que se avance en los hechos de corrupción que denunció públicamente y que, además pudo elevar a la propia justicia a través de las pruebas que pudo recopilar.
En la 99.9, el letrado advirtió que “todos los funcionarios públicos tienen la obligación de formular denuncias, más los fiscales que están para intervenir de oficio. La presentación que hice ante el intendente Arroyo de las irregularidades que encontré de la gestión Pulti cuando pedí la intervención de la Secretaría, terminé presentándolo ante la justicia”.
El caso más emblemático de la corrupción durante el gobierno de Gustavo Pulti fue la causa de las licencias truchas donde Razona también había avanzado: “como funcionario solicité el listado de las licencias truchas que estaban circulando y cité a todas esas personas para hacer un acuerdo y que no sigan circulando en la ciudad. Mediante el pago de una indemnización a la municipalidad por el gasto operativo y el perjuicio a la comunidad. Luego llegaríamos a un acuerdo para archivar las causas siempre y cuando no hubieran sido detenidos circulando con el carnet adulterado porque sería el uso de un instrumento público adulterado, que es un delito más grave”, explicó.
Por otro lado, y de acuerdo a su conocimiento de la causa, sabe que Belmonte no es el límite de la investigación como lo ha querido exponer ante la opinión pública el propio intendente en colaboración con el fiscal general Fabián Fernández Garello. “Esa causa no termina con Belmonte, se va a comprobar en el juicio oral. Hay muchos arrepentidos que han contado cómo era la operatoria. Me parece inadmisible que sigan circulando personas con estos carnets”, agregó.
Los peligros que representan los carnets que están circulando y que se sacaron en la ilegalidad, todavía sigue latente y es la principal preocupación del abogado: “hay 7.000 personas manejando sin habilitación para hacerlo y seguramente tendrán un auto con seguro, pero es una causal de exclusión. No es bueno para nadie, ni siquiera es una viveza criolla”.
Este tipo de problemas, también los planteó como una dificultad social que tiene el país porque es responsabilidad de quien sacó la licencia trucha hacerse cargo de lo que hizo: “las leyes están hechas para cumplirlas, vivimos en un estado de inseguridad por no cumplir las leyes. Si las cumpliéramos, viviríamos mucho mejor”, sintetizó.