Así lo indicó el ex Secretario de Educación de General Pueyrredón, indicando que lo planteado es inaplicable en las escuelas.
La provincia de Buenos Aires implementará cambios en la escuela media, según lo anunció el director general de Cultura y Educación, Alberto Sileoni. Solo se recursarán las materias desaprobadas, cuando el estudiante tenga más de cuatro asignaturas pendientes.
Este nuevo régimen que cambia el concepto de repitencia, se trata de otra regresión para el sistema igualando siempre hacia abajo el nivel. Pero también, existen serias dudas sobre la aplicación de lo planteado. Así lo indicó el ex Secretario de Educación de General Pueyrredón, Luis Distefano en diálogo con la 99.9: “el contenido del dictamen del Consejo General fue aprobado por todos, incluido el radicalismo y el PRO, ahí no hubo grieta, lo votaron por unanimidad. Se puede llegar a discutir la repitencia con otra escuela secundaria, con otra situación edilicia porque un profe que va dos horas de una escuela a otra no puede aplicar lo que se plantea, está alejado de lo que pasa día a día”.
La modificación principal tiene que ver con la distinción por materia, pero se implementa un método que ya se quiso hacer a la salida de la pandemia y no funcionó: “se habla de darle mayor peso a la acreditación de la materia pero si vos no acreditas una materia en el año, al año siguiente habría una intensificación durante 15 días donde te van a evaluar de una forma distinta. El profe tiene que comenzar de nuevo y paulatinamente evaluarlo, esto es inaplicable. El que no hizo nada durante todo el año, en esos 15 días no va y si fuera, el profesor no puede dar en ese tiempo todos los contenidos del año. Se indica que tendrán cuatro períodos de intensificación durante el año y el profe tendrá que dar, por ejemplo, física de cuarto año con sus alumnos y tendrá otros que vendrán al aula para enseñarles algo que ya debería haber aprendido. Es imposible con la realidad que tenemos hoy”.
Además hay una realidad que se repite en los establecimientos y es que el profesor o profesora, hoy puede enseñar muy poco: “en la escuela secundaria de hoy hay alumnos que llegan tarde porque hay un régimen laxo, que no le prestan atención, están con el celular y no podes sancionar porque todo es reflexión. Con suerte, en dos horas puede dar contenidos 15 o 20 minutos pero además tendrá integrados alumnos a los que les tendrá que explicar cosas del año pasado y encima evaluarlos. Es humo absoluto y va contra todos los parámetros de calidad educativa”.
Todo parece apuntar a la profundización de una política que se ha extendido durante años y es que los alumnos obtengan el título secundario aunque no tengan los conocimientos necesarios: “está impregnado en la educación que hay obligatoriedad porque tienen el derecho de terminar el secundario en seis años pero no importa como así puede ir a la Universidad. Las inspectoras te dicen eso. Es una cuestión ideológica que evidentemente es sostenida por muchos porque la aprobación fue unánime”.