La activista paquistaní recibe hoy el Nobel de la Paz.
La activista paquistaní Malala Yusafzai espera poder iniciar una carrera política e incluso aspirar a ser primera ministra en su país cuando termine sus estudios en Reino Unido.
«Quiero servir a mi país y mi sueño es que se convierta en un país desarrollado en el que todos los niños tengan acceso a la educación», ha afirmado Malala este martes en una entrevista en la cadena de televisión británica BBC en la víspera de recibir el Premio Nobel de la Paz.
«Si puedo servir mejor a mi país a través de la política y de convertirme en primera ministra, elegiría eso», ha agregado, antes de recalcar que siempre se ha visto inspirada por Benazir Bhutto, quien fue primera ministra del país en dos ocasiones antes de su asesinato en 2007.
Tras destacar que es un gran honor para ella compartir el Nobel con el activista indio Kailash Satyarthi, ha explicado que el galardón le ha dado «más esperanza y más valor». «Me siento más fuerte que antes porque siento que mucha gente está conmigo», ha dicho.
«Hay más responsabilidades, pero me he impuesto esas responsabilidades. Siento que tengo que responder ante Dios y ante mí misma y que debo ayudar a mi comunidad. Es mi tarea», ha añadido Malala.
Por otra parte, la activista ha expresado su decepción por el hecho de que los primeros ministros de Pakistán e India, Nawaz Sharif y Narendra Modi, respectivamente, no vayan a acudir a la gala de entrega del galardón, que se celebrará hoy en Oslo.
El comité del Nobel ha destacado a través de un comunicado la importancia de que una musulmana y un hindú, una paquistaní y un indio, se hayan unido en una lucha común a favor de la educación y en contra del extremismo.