El Director del Teatro Colón puso luz en la 99.9 sobre las conversaciones que se dieron con los directivos del Club Español por el nuevo contrato de concesión: “hubo mucho tránsito mediático, me atrevo a decir operaciones, alrededor del Teatro Colón”, indicó. Además, apuntó a los responsables: “en 2014 y 2015 no se hizo obra alguna y los responsables son Gustavo Arnaldo Pulti como intendente, Leandro Laserna como Secretario de Cultura y Luis Reales en su condición de director del Colón que no cumplieron con lo que habían firmado”.
Las reuniones en torno al contrato que se debía firmar para la concesión del Teatro Colón llegaron a buen término. Así lo expresaron desde el gobierno municipal, aclarando que el conflicto que se intentó establecer mediáticamente no fue tal.
El actual director del Teatro, Marcelo Gobello indicó en la 99.9 que “hubo mucho tránsito mediático, me atrevo a decir operaciones, alrededor del Teatro Colón. El dueño del Teatro no es el estado, tiene un dueño que es el Club Español”, aclaró primeramente.
Para poner claridad sobre el tema, se remontó al origen del conflicto: “hay un convenio del 2014 donde, por una deuda anterior, las autoridades del momento hicieron un acta de acuerdo por 3 años hasta diciembre de 2016. Ahí se comprometían a hacer una serie de obras de reparación y puesta en valor del teatro por un costo de 523.000 pesos. Este anexo tiene 11 páginas de todo lo que la Municipalidad se comprometió a realizar, más allá del pago de un alquiler bastante modesto”, puntualizó.
Como la situación edilicia no era la mejor para el teatro, decidieron perdonar la deuda a cambio de obras, pero la gestión anterior no hizo nada de lo que había asumido como un compromiso: “la gente del Club Español quería mantener el edificio y por eso condonó la deuda a cambio de las obras. En 2014 y 2015 no se hizo obra alguna y los responsables son Gustavo Arnaldo Pulti como intendente, Leandro Laserna como Secretario de Cultura y Luis Reales en su condición de director del Colón”, dejó en claro Gobello.
Además, señaló que al momento de asumir el actual gobierno ya había una deuda que se sumaba al dinero que debe desembolsar el municipio: “cuando asumió Arroyo, se debía el año 2015 completo de pagos además de las obras anteriores. Con un municipio absolutamente quebrado, se terminó el 2016 pagando lo atrasado y lo propio más la promesa de buscar fondos para hacer estos arreglos”, indicó sobre el trabajo que hicieron para tratar de enderezar el rumbo.
Mediáticamente la versión fue completamente distinta y detrás de esas campañas, están los propios responsables del desmanejo: “se magnificó todo como si se perdía el Teatro o se desalojaba el lugar, pero no pasó nada de eso. Lo que más llama la atención es que te critican los mismos que son responsables de esta situación”, sentenció.