El fiscal del fuero de menores contó detalles en la 99.9 del caso del niño de 8 años que llevó un arma al colegio en Mar del Plata y remarcó que “al ser inimputable la causa se encamina más para una parte social o asistencial que penal”.
Hace unos días atrás, Mar del Plata se volvió noticia por un niño de 8 años que llevó a la escuela un arma de fuego y se lo contó a la docente a cargo del aula. Este hecho, tiene todo un contexto que está en plena investigación.
El fiscal del fuero de menores Marcelo Yañez Urrutia se refirió a los detalles del hecho en la 99.9 y, sobre todo, a la situación procesal del niño: “fue una noticia impactante, un hecho gravísimo por las consecuencias que podría haber tenido si este niño, en vez de manifestarlo en el ingreso de las clases, hubieran estado manipulando en el recreo el arma en cuestión. Este niño quizás lo hizo desde su inocencia en tomar el arma que pertenecía a alguien de la familia para llevarla a la escuela. No estaba cargada, pero tenía las municiones en la mochila”.
En el ingreso a clases fue cuando la docente se enteró de esta situación justamente a través del propio niño: “en el momento que tomaban asistencia fue cuando el niño manifestó tener un arma en la mochila. La maestra quedó sorprendida y el niño sacó una munición de adentro. Otro compañero expresó que era verdad por lo que se la debía haber mostrado previamente. La maestra actuó rápido y bien porque se dirigió con el niño a la dirección para que lo vea la directora. Ninguna de las dos manipuló el arma y llamaron al 911”.
A partir de ese momento, se empezó a investigar como esa armar llegó a la mochila del niño y quien era responsable de ello: “había sido llamada la madre del niño que expresó de forma voluntaria que el arma pertenecía a su vivienda y que la había traído su hermano, el tío del pequeño, y la había dejado en un altillo. Mucho más no se avanzó en virtud que, como fiscal, el menor tan pequeño no lo puedo responsabilizar. Al ser inimputable la causa se encamina más para una parte social o asistencial que penal”.
De todas maneras, se elevó un informe a la fiscalía general para que se investigue porque había un arma en el domicilio y si tenían el correspondiente registro de la misma, como así también observar las conductas previas del niño: “se ha tomado como un hecho aislado e insólito, pero se pedirán informes a la escuela para ver como era el niño, su comportamiento y ver si surge algo más que no se haya expresado en la testimonial. Hay que trabajar para que esto no suceda con otro niño”.
En el territorio de las teorías, también Yañez Urrutia expresó su opinión sobre los motivos por los cuáles un niño podría tomar un arma y llevarla a un colegio: “no estamos alejados de lo que sucede en otras partes del mundo. Hay muchas cosas que ven en TV; muchos juegos en la Play donde se vincula constantemente a la violencia y las armas de fuego. Como hipótesis mía, quizás el niño quisiera demostrar que tiene un arma como la del jueguito”.