La muerte de este afroamericano con problemas mentales recuerda a la que ha desencadenado esta semana disturbios en Ferguson.
Decenas de personas protestaron en Los Ángeles (California) en la noche del jueves por la muerte de un joven afroamericano con presuntos problemas mentales a manos de un agente en esa ciudad, un suceso que recuerda al que ha desencadenado esta semana disturbios en Ferguson (Misuri).
En una marcha pacífica y con limitada presencia policial, sin la tensión y los incidentes de las pasadas noches en Ferguson, los manifestantes pidieron “justicia” en un caso que investiga la Policía local y en el que, como en Misuri, las versiones de los testigos y los agentes son contradictorias.
Según la información facilitada hasta ahora por la Policía, el suceso comenzó cuando este lunes dos agentes de patrulla pidieron al joven Ezell Ford, que caminaba solo por una calle del sur de Los Ángeles, que se detuviese.
Por motivos no revelados, el joven y los agentes iniciaron una trifulca y, según la Policía, Ford empujó a uno de los agentes y trató de arrebatarle el arma, por lo que uno de los policías le disparó. Tras recibir el impacto de la bala, Ford fue trasladado al hospital, donde falleció.
La muerte de Ford tuvo lugar dos días después de que el sábado un Policía de raza blanca matase a un adolescente negro desarmado en Ferguson en circunstancias aún por esclarecer, lo que desató incidentes violentos y protestas que se apaciguaron el jueves gracias al relevo en la policía a cargo de la seguridad de las marchas.
Según sus allegados, Ford sufría un trastorno mental, algo que no ha sido confirmado oficialmente, como tampoco han sido desvelados los motivos por los que los agentes decidieron detenerle.
El incidente lo investiga la División de Fuerzas de Investigación del Departamento de Policía, así como la oficina del fiscal del distrito del condado de Los Ángeles.
Hasta este jueves las marchas se habían limitado a Ferguson, pero la pasada noche miles de personas en toda la nación se reunieron en parques y plazas organizados en las redes sociales por el movimiento “National Moment of Silence for Victims”, con la etiqueta de Twitter “NMOS14”.
Más de 90 ciudades de 35 estados celebraron vigilias y un “minuto de silencio nacional” en honor a las víctimas de la violencia policial tras el suceso de Ferguson y cuando se investiga el caso del joven afroamericano fallecido en Los Ángeles también a manos de un agente.
Estos sucesos han despertado de nuevo el debate racial en el país, todavía con el recuerdo reciente del caso de Trayvon Martin, un adolescente afroamericano que murió a manos de un vigilante voluntario que le disparó en Florida en 2012.