Mariana Hualde: “Tenemos casos de tuberculosis semanalmente en el HIGA”

La responsable del Área de Infectología del Hospital habló en la 99.9 sobre la presencia de la tuberculosis que es una enfermedad que se creía erradicada: “hay que dejar de hablar de enfermedades ampliamente superadas”.

Cuando socialmente se tiende a pensar que algunas enfermedades fueron erradicadas, la evidencia científica indica exactamente los contrario. En Mar del Plata puntualmente, hay todas las semanas nuevos casos de tuberculosis por lo que es importante concientizar sobre esta afección.

La infectóloga Dra. Mariana Hualde, responsable del área en el Hospital Regional habló en la 99.9 indicando que “el primer concepto que tenemos que evaluar es el tema de hablar de enfermedades ampliamente superadas. Ni la tuberculosis ni la sífilis estaban ampliamente superadas, lo que se había encontrado en las últimas décadas era un descenso en el número de los casos, pero a partir, sobre todo en el caso de la sífilis, que es una enfermedad de transmisión sexual y que tiene otro comportamiento dentro de la sociedad, ya previo a la pandemia empezamos a observar y a documentar un aumento progresivo de los casos. En la tuberculosis, particularmente después de la pandemia, hubo un aumento en el diagnóstico de casos y esto ha tenido que ver, entre otras múltiples causas, con el tema de que durante un año y pico la sociedad estuvo alejada de los controles médicos. Saliendo de la pandemia empezamos a observar un aumento en el número de consultas y por lo tanto un aumento en el número de diagnósticos, pero ninguna de las dos patologías estaba superada o erradicada. La gente le parece que la tuberculosis es una enfermedad o una patología del otro siglo y la verdad que lamentablemente no”.

En Mar del Plata están todo el tiempo detectando casos nuevos y habla de la circulación de la enfermedad: “tenemos casos de tuberculosis semanalmente. Por la característica de la enfermedad, que es de transmisión aérea, es decir, las personas que están en contacto con un caso de tuberculosis tienen riesgo de adquirir la patología; tenemos que hacer un trabajo no sólo de diagnóstico y tratamiento de los pacientes, sino de control de todos los convivientes, de las personas que trabajan con esa persona, o el ámbito escolar, todo lo que rodea a este paciente, para tratar de detectar otros casos. Es una enfermedad crónica, que no tiene una presentación aguda, y muchas veces puede confundirse en sus inicios con cualquier otra patología respiratoria”.

Luego dio algunos importantes aspectos a los que hay que estar atentos porque podrían ser indicios de l presencia de la enfermedad: “el paciente típico con tuberculosis, viene con síntomas respiratorios de por lo menos más de dos semanas de evolución, con tos, con expectoración, a veces puede tener un poco de sudoración nocturna. Muchas veces estos casos al inicio cuando son evaluados, se interpretan como cuadros virales o bacterianos comunes, como una bronquitis y la persistencia de estos síntomas más allá de dos semanas tiene que hacernos siempre pensar, sospechar y descartar una tuberculosis”.

Es una enfermedad además que se transmite por el aire y eso implica que puede propagarse con mayor velocidad: “la vía de transmisión de la tuberculosis es aérea. El vacilo de la tuberculosis está dentro de las gotas de saliva, que uno en el momento en que habla, tose, expectora, se ríe y demás, despide. Son gotas muy muy pequeñas, que quedan flotando en el aire y se transmiten a una distancia un poco considerable. No es una gota gruesa. La tuberculosis se transmite por la gota fina, que se traslada un poco más en el espacio. Por eso, todo paciente tosedor crónico es un eventual transmisor de tuberculosis hacia su entorno”.

También agregó que no se trata sólo de una afección que está vinculada a malas condiciones de vida: “los pacientes que están en una situación de vulnerabilidad, aquellos que no tienen las condiciones sanitarias adecuadas, las personas que están con una alimentación deficiente, son más vulnerables a la tuberculosis y a cualquier otra patología. Hay pacientes más vulnerables y hay entornos que facilitan más la transmisión. Los lugares con hacinamiento, por ejemplo, es en donde la transmisión se facilita mucho más. Ahora, cualquier persona, en cualquier condición de salud, de cualquier estrato social, puede tener una tuberculosis. Hay como un mito de que la tuberculosis no va a suceder en determinados grupos de pacientes o en determinados grupos sociales, y eso no es así. La tuberculosis es una enfermedad que por el tipo de transmisión que tiene, puede tenerla cualquier persona”.

Hoy se puede tratar y el paciente termina curado, pero es muy importante la detección y siempre, desde el punto de vista de los profesionales tenerla presente en el diagnóstico: “hay un tratamiento que es altamente efectivo en los pacientes. Es largo, de al menos seis meses, pero los pacientes resuelven y se curan. También es difícil sostener en el tiempo muchas veces los tratamientos pero la verdad es que las drogas están ampliamente disponibles y hay sistemas de acompañamiento de los pacientes y de atención durante todo el tratamiento”.