Marina Simian y el test para la detección del cáncer: “Queremos que lo que hacemos en el laboratorio llegue a las personas, ojalá podamos hacerlo desde Argentina”

La doctora en Ciencias Biológicas e investigadora del Conicet lidera Oncoliq, una empresa de base tecnológica que desarrolla un revolucionario test para la detección temprana de cáncer; habló en la 99.9 sobre el impacto sanitario, la necesidad de inversión y el cambio de paradigma en la ciencia argentina.

La científica Marina Simian, doctora en Ciencias Biológicas e investigadora del Conicet, está al frente de Oncoliq, una empresa de biotecnología argentina que avanza hacia la comercialización de un test de detección temprana de cáncer. “Oncoliq es una empresa de base tecnológica que surgió de una investigación que empezó en el 2014 en el laboratorio de mi socia Adriana de Siervi”, explicó en la 99.9.

El trabajo comenzó estudiando en ratones “la función de unas moléculas que se llaman microRNA”. Luego, el equipo pasó a trabajar con “muestras humanas, con sangre de pacientes con cáncer de mama y mujeres sanas” y descubrió que podían “predecir la presencia de un tumor de forma temprana, mediante el análisis de estas moléculas por PCR y combinando eso con técnicas de Machine Learning”.

En plena pandemia, en 2021, decidieron buscar capital de riesgo. “Este año ya levantamos la tercera ronda de inversión, nos estamos preparando para salir al mercado hacia fin de año, con nuestro primer análisis de sangre, que es para detección de cáncer de mama. Estamos empezando a trabajar ya sobre la tecnología para detectar cáncer de pulmón”, detalló. El objetivo es ambicioso: “Que nuestra tecnología permita cubrir más del 90% de los tipos de cáncer que tienen las personas”.

Simian subrayó que esta herramienta “no viene a reemplazar nada, sino que acompaña lo que hay, que es poco, porque si lo pensamos hoy, hacemos tamizaje para muy pocos tipos de cáncer”. También destacó su valor para zonas alejadas: “Un análisis de sangre es algo que permite, de alguna manera, dar acceso en zonas no urbanas, donde no hay tecnologías por imágenes”.

El acceso temprano, señaló, es clave: “Se detecta temprano, la mayoría de las personas se cura. La detección tardía, la mayoría va a fallecer antes de los cinco años. Además, los costos asociados al tratamiento disminuyen drásticamente si uno detecta la enfermedad temprana”.

En cuanto a la propiedad intelectual, confirmó: “Tenemos la licencia de la patente del Conicet en fases nacionales, en Estados Unidos y en Argentina. Esta última iteración de la tecnología nos va a llevar a otra patente, porque hemos ido adaptando la tecnología al mercado”. La automatización, explicó, “reduce mucho los costos del test y permite procesar muchas más muestras”.

La científica fue clara en su visión: “Queremos que lo que hacemos en el laboratorio llegue a las personas, ojalá podamos hacerlo desde Argentina. El gobierno se equivoca cuando no apoya la ciencia, no impulsa el surgimiento de empresas de base tecnológica. El país se pierde la posibilidad de ser líder en productos y servicios biotecnológicos”.

Para Simian, la colaboración internacional es esencial: “La ciencia funciona como una red a nivel global. Si no estamos insertados, es como que no estamos participando. Esto avala el nivel de lo que hacemos en los laboratorios en Argentina”. Y enfatizó la oportunidad que tiene el país: “Tenemos mucho conocimiento listo para empezar a hacer este proceso de buscar inversión y transformarlo en algo aplicable al día a día de las personas”.

Sobre el cambio cultural en el sistema científico argentino, afirmó: “Es una oportunidad y creo que hay que aprovecharla. Al final es un círculo virtuoso, como se ve en ciudades como Boston, donde el ecosistema es autosustentable, con trabajo conjunto entre academia y empresas”.

Finalmente, reivindicó la tradición científica local: “Hay que valorar la escuela que tenemos acá. Somos líderes en Latinoamérica en ciencias duras. Esto no pasa de un día para el otro. Es un tema cultural y resultado del trabajo desinteresado de muchas personas”.