La doctora en Química, Marta Litter, se refirió a la presencia de arsénico en el agua en la 99.9 y señaló que lo que se viene hablando no es alarmante: “no quiere decir que la población está enferma, sino que puede llegar a tener alguna influencia sobre la salud de las personas la presencia de arsénico en agua que pueda consumir”, agregó.
La presencia de arsénico en el agua vuelve a ser un tema que tímidamente asoma en algunos medios y que merece un análisis más profundo. La doctora en Química, Marta Litter es una de las especialistas en el tema y habló en la 99.9 sobre la realidad que afronta nuestro país.
En principio, señaló que “no debe existir el pánico. La población se debe quedar tranquila. El número de personas que salen en los diarios afectada no es tan así. No quiere decir que la población esté enferma, sino que puede llegar a tener alguna influencia sobre la salud de las personas la presencia de arsénico en agua que pueda consumir”.
Lo que advirtió es que desde el estado se debe hacer algo concreto porque es la única manera de abordar seriamente el tema. “Debería ser una política de estado, algo que nunca lo fue. Todo lo que sea integral ayuda, porque no se puede tratar sólo un punto como el arsénico, sino se avanza de manera integral”, indicó.
También dejó en claro que nada cambiará sólo con investigarlo pero los datos ya están recogidos y de manera articulada se pueden tomar decisiones importantes: “hay mucha gente en el país trabajando. Tuvimos una red iberoamericana por el tema arsénico hace unos años, formamos un grupo de investigadores con personalidades destacadas. El tema se sabe desde 1913, hay mucha gente que sabe y nunca se la convocó para analizar el tema. Nosotros no vamos a resolver el tema, debe hacerlo la política”, advirtió.
A pesar de conocer la presencia de arsénico hace más de un siglo nunca se accionó al respecto y se debe hacer porque seguirá presente en el agua. “El problema de Argentina es que el arsénico es un contaminante natural que estará presente en el agua todo el tiempo ya que proviene de procesos geológicos y geoquímicos. El problema es que la superficie comprendida es muy amplia y por eso hay mucha gente a la que puede afectar”, explicó la Dra. Litter.
Desde el grupo de trabajo que tiene la propia especialista, reclamó que los llamen y puedan compartir la experiencia que han recogido: “se necesita muy poco para encarar el tema con seriedad, queremos que nos convoquen para abordar el tema”, finalizó.