El Secretario de Seguridad de General Pueyrredón indicó que mientras haya toma en los terrenos del Barrio Las Heras, no tendrán ningún tipo de negociación con quienes definió como “delincuentes”.
La toma de tierras en el Barrio Las Heras sigue sumando capítulos día a día. Luego del pedido de desalojo del gobierno municipal y el rechazo del juez Saúl Errandonea, se apeló la decisión porque, por orden de Guillermo Montenegro no se negociará con quienes considera delincuentes.
El Secretario de Seguridad de General Pueyrredón, Martín Ferlauto, habló al respecto a través de la 99.9 y dio detalles sobre lo organizado que fue el ingreso al predio, lejos de la idea de gente con necesidades urgentes que se hace presente allí: “hay cierto grado de organización en la toma. No sabemos si hay alguna organización social detrás, algunas de las personas de la toma se identificaron como vinculadas al MTE de Juan Grabois, pero no sabemos efectivamente si la organización es la que realizó la toma o simplemente gente que milita allí. Quedará para la justicia, en el marco de la investigación, determinar quienes forman parte de la estructura que pensó esta usurpación”.
La presencia de muchos niños allí, es un tema que nunca es analizado seriamente, porque hay una evidente vulneración de sus derechos: “es casi un abandono de persona, es un lugar peligroso hasta para los propios usurpadores. Hay informes de Obras Sanitarias, de personal muy calificado que dice que ese lugar no tiene las condiciones para que se establezcan personas. Es claramente un delito de usurpación, pero además un peligro para los delincuentes que tomaron el lugar“.
Esta mañana, habrá una audiencia de mediación para tratar de llegar a un acuerdo, pero la postura del gobierno municipal está muy clara: “en la audiencia haremos saber que no habrá negociación ni canal de diálogo de ningún tipo en tanto no se vayan del lugar. No negociaremos con personas que están cometiendo un delito poniendo en riesgo sus propias familias, sino es habilitar al delito, a la usurpación y la extorsión para arrancarle una medida a los vecinos de la ciudad”.
Lo que tienen claro es que alguien está detrás de todas estas medidas porque incluso tienen imágenes de como se inició todo: “el 70 u 80% de las personas que están ahí, son del barrio, de zonas cercanas. No es gente que vino desde otros lugares. Es otro punto para investigar porque hay que saber en que lugares vivían, supuestamente no tienen vivienda. Es un error en el análisis del juez que presupone un estado de vulnerabilidad que no está comprobado. Se ve por las cámaras y por los testimonios de la policía que llegó al lugar ni bien comenzó todo, que llegaron en autos prácticamente de alta gama. La situación habitacional hay que investigarla, no se puede presuponer”, aclaró Ferlauto.