El Secretario Ejecutivo de AIEPBA habló en la 99.9 sobre la situación que atraviesan los colegios privados de la provincia luego de que señalaran que hay 30 establecimientos con riesgo de cierre definitivo: “tenemos los mismos gastos que cualquier pyme”.
Como otros tantos sectores de nuestro país, los colegios privados están atravesando una situación complicada y esta semana, desde la Asociación de Colegios Privados de la Provincia de Buenos Aires (AIEPBA), indicaron que hay alrededor de 30 instituciones con peligro de cierre definitivo.
El Secretario Ejecutivo de la institución, Martín Zurita, comentó en la 99.9 que “venimos alertando de las dificultades del sector. Son 6300 escuelas con heterogeneidad muy grande, hay algunas que tienen espalda para aguantar esta situación y otras que no. Este año nos han limitado las cuotas de aquellos establecimientos que reciben aporte estatal por los Precios Justos desde marzo hasta julio. Nos opusimos porque sabíamos que tendríamos consecuencias negativas. Después del cierre de escuelas en la cuarentena, 80 escuelas cerraron en la provincia y muchas quedaron golpeadas”.
El problema es que la reactivación del sector no es inmediata y todavía las dificultades persisten y se extienden desde la pandemia: “es un sector que tarda entre 5 o 10 años de recuperarse. En un contexto con la sociedad golpeada a nivel económico, aumentar las cuotas todos los meses hace que muchas familias no pueden aguantar ese ritmo. El límite es donde el bolsillo de las familias puede pagarlo. Hay un 40% de la población que trabaja en la informalidad y no tiene paritarias como en sectores formarles. Esto genera deudas, demoras y las escuelas sin ingresos no pueden afrontar sus obligaciones”.
A eso se agrega el costo que habitualmente el estado pone sobre cualquier tipo de emprendimiento y donde las escuelas privadas no quedan afuera: “el IPS tiene intereses leoninos, lo hacen para que la gente no la pueda pagar. Estamos hablando que gente que no paga porque no puede, no porque no quiere. Muchas escuelas en la pandemia quedaron sin recaudación o con recaudación muy baja. Hubo una escuela que perdió 200 alumnos en la pandemia”.
Lo que pretenden básicamente es ser escuchados porque hay un problema latente desde hace mucho tiempo y a pesar del caudal de alumnos que manejan, no parece interesarle a ningún gobernante: “las escuelas también son una pyme, a pesar de las características especiales, porque tenemos los gastos de cualquier Pyme y hay familias detrás que confiaron en un proyecto. Hay razones económicas que hace que entre el 80 y el 90% de la cuota de un colegio privado es costo laboral. Cuando se negocian paritarias lo hacen con la lógica del presupuesto de la provincia pero no nos consultan si podemos pagar esos sueldos. A escuelas privadas concurren 1 millón y medio de alumnos en la provincia pero somos convidados de piedra”.
Con el diálogo consideran que el problema se puede solucionar, pero no hay intenciones de hacerlo: “estamos pidiendo que el estado acompañe esta realidad para que podamos acomodarnos y las escuelas no tengan estas problemáticas que los llevan a riesgos de cierre”.