El portavoz del Ministerio de Desastres ha actualizado este domingo la cifra de víctimas. También hay 1.329 casas destruidas.
Los terremotos que sacudieron este sábado el oeste de Afganistán han dejado más de 2.000 personas muertas y más de 9.000 heridos, según informó la administración talibán. Se trata de los temblores más mortíferos en años en un país propenso a los seísmos.
En medio de la confusión, la cifra de muertos por los seísmos del sábado aumentó a los 500 comunicados el domingo por la mañana por un portavoz de la Media Luna Roja desde los 16 que se contabilizaron en un primer momento.
Los seísmos se produjeron a 35 km al noroeste de la ciudad de Herat, y uno de ellos tuvo una magnitud de 6,3, según informó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
El mulá Janan Sayeeq, portavoz del Ministerio de Desastres, dijo a Reuters que había 2.053 muertos, 9.240 heridos y 1.329 casas dañadas o destruidas.
Más de 200 muertos habían sido trasladados a distintos hospitales, dijo a Reuters un funcionario del departamento de sanidad de Herat que se identificó como Dr. Danish, añadiendo que la mayoría eran mujeres y niños. Los cadáveres habían sido “trasladados a varios lugares: bases militares, hospitales”, dijo Danish.
Los seísmos provocaron el pánico en Herat, según declaró el sábado Naseema, residente en la ciudad. “La gente salió de sus casas, todos estamos en la calle”, escribió en un mensaje de texto a Reuters, añadiendo que la ciudad estaba sintiendo temblores consecutivos.
La ONG Médicos Sin Fronteras dijo estar apoyando la atención médica del hospital regional de Herat, “donde han llegado más de 300 heridos”, según informó en la red social X, antes Twitter.
“Hemos instalado 5 tiendas de campaña médicas para albergar hasta 80 pacientes y estamos apoyando la sala de urgencias con personal y material médico”, agregó la organización internacional.
Afganistán sintió este sábado al menos siete temblores. El primero de todos, el de mayor magnitud, ocurrió a las 12:11 (+5:30 GMT) a 14 kilómetros de profundidad y a 33 kilómetros de la ciudad de Zindah Jan, ubicada en la provincia de Herat, según el USGS.
Le siguieron cuatro réplicas consecutivas de 5,5; 4,7; 6,3; y 5,9 respectivamente en un lapso de una hora.
El cuarto seísmo, también de 6,3 grados, se registró a unos diez kilómetros de profundidad y a unos 29 kilómetros de Zindah Jan.
Más tarde, el servicio de sismología estadounidense sintió otros dos temblores casi una hora después en la provincia de Herat de 4,8 y 4,9 grados, respectivamente.
DESASTRES NATURALES
El país asiático se encuentra entre los países más propensos a desastres naturales, al estar situado en la cadena montañosa del Hindu Kush, un punto de gran actividad sísmica y habitual punto de origen de movimientos telúricos en la región.
Sin embargo, Afganistán cuenta con una población muy vulnerable, mayormente pobre, además de carecer de infraestructura suficiente para hacer frente a desastres como inundaciones o terremotos.
A finales de junio del año pasado, un terremoto similar de magnitud 5,9 en las provincias afganas orientales de Paktika y Khost, fronterizas con Pakistán, provocó la muerte de más de mil personas y unos 1.500 heridos, además de la destrucción de cientos de viviendas.
Afganistán sufrió también una de las mayores catástrofes causadas por terremotos en 1998 en el norte del país, cuando en febrero dos seísmos de magnitud 5,9 y 6 causaron la muerte de unas 4.000 personas. Pocos meses después, a finales de mayo, otro seísmo de magnitud 7 volvió a sacudir la zona y causó unos 5.000 muertos.