Masivas marchas en México a un año de la desaparición de los 43 estudiantes de Iguala

La manifestación central se realizó en la capital. Pero hubo otras en el interior del país. El presidente Peña Nieto se comprometió a resolver el brutal crimen.

Protesta-Masiva-capital-mexicanaCon masivas marchas y protestas en distintos puntos del país, México conmemoró ayer el primer aniversario de la desaparición de los 43 estudiantes rurales de Ayotzinapa. Los familiares volvieron a denunciar la inacción y la falta de respuesta del gobierno en este caso, que conmueve a la sociedad mexicana.
En respuesta, el presidente Enrique Peña Nieto aseguró ayer que su gobierno está comprometido con encontrar la verdad de lo ocurrido con los adolescentes. “A un año de distancia de los trágicos hechos en Iguala, reitero el compromiso del gobierno de México con la verdad y la justicia”, escribió en su cuenta de Twitter.
El acto central se realizó en la capital mexicana y estuvo encabezado por los padres y familiares cercanos de los estudiantes de magisterio del Normal Rural de Ayotzinapa, Iguala. La marcha salió desde la residencia oficial de Los Pinos hacia la Plaza del Zócalo, en el centro de la ciudad, y recorrió el Paseo de la Reforma coreando “Ayotzi vive, Ayotzi vive. La lucha sigue, sigue”.
El 26 de septiembre de 2014, policías cooptados por los carteles de la droga que operan en la zona atacaron a los estudiantes que habían llegado a la ciudad de Iguala, en el sureño estado de Guerrero, a tomar unos micros para participar en una manifestación contra las autoridades regionales. Allí hubo seis muertos. Algunos lograron huir, pero 43 fueron capturados por los policías y entregados a los narcotraficantes, que supuestamente los ejecutaron y calcinaron sus cuerpos en una gran hoguera en un basural de Cocula, una población cercana.
Hay muy pocos datos concretos y lo poco que se sabe es producto de las declaraciones que hicieron ante la policía tres sicarios del narcotráfico que fueron detenidos, y que la Fiscalía tomó como verídico.
Sin embargo, el grupo de expertos independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos rebatió esa versión después de una investigación propia. Para ellos no existió la escena de la hoguera. Y sugirieron que el móvil del ataque fue que los estudiantes, sin saberlo, tomaron un micro que llevaba droga o dinero. Iguala, donde opera el cartel Guerreros Unidos, es conocida como un centro de distribución y tráfico de heroína hacia Estados Unidos.
El expediente sigue en manos de los fiscales estatales en Guerrero, donde la falta de recursos, la inexperiencia y la corrupción hacen que sea aún menos probable que se haga justicia.
Organizaciones de todo tipo, desde Naciones Unidas a la Iglesia Católica, así como senadores estadounidenses, hicieron pública su preocupación por la falta de avances en la investigación y solicitaron al gobierno mexicano que esclarezca el caso.
En estados como Guerrero o Michoacán hubo protestas previas esta semana, y las fuerzas de seguridad están en alerta ante posibles focos de violencia.