Un estudio de la Universidad de Sidney detalla los beneficios de esta práctica. Y asegura que la eyaculación libera hormonas como el cortisol, que ayuda a mejorar las defensas y prevenir enfermedades.
Un estudio realizado por la Universidad de Sydney, citado en el portal The Conversation, demuestra que al eyacular se liberan hormonas como el cortisol, que ayuda a mejorar las defensas del cuerpo humano. Además, la práctica de la masturbación también colabora con la prevención de las siguientes enfermedades:
Cáncer:
De acuerdo a un estudio realizado por el Cancer Epidemiology Centre de Melbourne, Australia, los hombres que se masturban por lo menos cinco veces a la semana y están en un rango de edad de entre los 20 y 50 años, tienen menos riesgo de padecer cáncer o tumores prostáticos.
Diabetes:
Desde la Universidad de Sydney aseguran que la masturbación reduce el riesgo de padecer diabetes tipo 2, pues brinda una mejor salud general y beneficios como la reducción del insomnio a causa de la liberación de tensión y hormonas, así como el aumento de la fuerza pélvica que provocan las contracciones en el caso del orgasmo femenino.
Infecciones urinarias:
El mismo estudio menciona que masturbarse reduce el riesgo de padecer enfermedades del tracto urinario y contraer infecciones como la cistitis. En las mujeres, la masturbación ayuda a que se abra el cuello uterino, liberando mucosidad y fluidos cervicales, los cuales suelen albergar bacterias.
Síndrome de Piernas Inquietas:
La masturbación también sirve para reducir el Síndrome de las Piernas Inquietas, que produce calambres, sensación de hormigueo, dolor e inflamación. Así lo indica un estudio publicado por el Medical Journal of Sleep Medicine, y agrega que también ayuda a mejorar la calidad de sueño.
Depresión:
La masturbación libera endorfinas, hormonas relacionadas con la felicidad que, al combinarse con el cortisol, ayudan a mejorar el humor. Los científicos advierten que estos efectos ayudan a combatir la depresión, sobre todo en las mujeres.