Matan en una cárcel de Ecuador a 7 ciudadanos colombianos acusados por el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio

El gobierno ecuatoriano confirmó que siete de las personas procesadas por la muerte de Fernando Villavicencio, el candidato presidencial asesinado el 9 de agosto en plena campaña electoral fueron halladas sin vida.

Seis en el Penal del Litoral, en las afueras de Guayaquil y una más en una prisión de Quito, dijo la agencia penitenciaria.

“Todas las PPL (personas privadas de la libertad) son de nacionalidad colombiana y estaban implicados en el asesinato de Fernando Villavicencio”, informó el Servicio Nacional de Atención a Personas Privadas de la Libertad (SNAI).

El SNAI añadió que los muertos son Jhon Gregore R., Andrés Manuel M., Adey Fernando G., Camilo Andrés R., Sules Osmin C. y José Neyder L. Hasta el momento se desconoce el nombre del séptimo.

No se especificó la causa de la muerte de ninguno pero una fuente citada por el diario El País de España apunta a que los del Penal del Litoral fueron ahorcados. Los cuerpos sin vida fueron recuperados en el pabellón 7 de la cárcel, donde estaban recluidos.

El Ministerio Público dijo que sus agentes, junto con policías y militares, estaban “ejecutando protocolos de seguridad ante los disturbios ocurridos el viernes por la tarde”.

Agregó en un comunicado en X que “en las próximas horas, personal militar especializado realizará los primeros allanamientos y reconocimientos del Pabellón 7, donde se originaron los incidentes, para tomar control de la situación”.

El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, quien se encontraba en Nueva York y tenía previsto una gira a Corea del Sur, anunció que regresará anticipadamente al país.

“En las próximas horas regresaré al Ecuador para atender esta emergencia. Ni complicidad ni encubrimiento, aquí se conocerá la verdad”, publicó el mandatario en su cuenta de la red social X (antes Twitter).

El mandatario ordenó, además, que “tras la información de los crímenes” se instale de inmediato el Gabinete de Seguridad.

“Hay que ser un esfuerzo por dejar, desde lo político, una real evidencia de que podemos luchar contra las brutalidades y tiranías de los grupos violentos, que se manejan tanto desde la política como desde el narcotráfico”, afirmó en una entrevista con BBC Mundo, Christian Zurita, amigo personal de Villavicencio que asumió la candidatura vacante tras el asesinato del candidato presidencial.

“Estoy seguro que un jefe de gatilleros de una banda, por más grande y poderosa que sea, no tiene el poder político para decidir un crimen de este tipo” añadió

Villavicencio, un exdiputado y periodista de investigación dedicado a temas de corrupción, fue asesinado a tiros cuando salía de un evento de campaña la noche del miércoles 9 de agosto, a pocos días de las elecciones, que se celebraron el 20 de ese mes.

El asesinato conmocionó a Ecuador.

Recibió tres disparos en la cabeza a la salida de un acto político en Quito, un hombre que fue señalado como el presunto autor material del crimen murió.

Según la Fiscalía de Ecuador, quedó herido durante el cruce de balas con las fuerzas de seguridad y luego falleció. Tenía antecedentes penales, ya que previamente había sido arrestado por cargos relacionados con armas, informó el gobierno.

Las autoridades anunciaron entonces la captura de varios presuntos implicados en el homicidio. La detención se hizo a pocas horas del ataque armado tras varios allanamientos en el sureste y sur de Quito.

Por su parte la fiscalía ha iniciado una investigación por las acciones del Servicio Penitenciario (SNAI) porque existía una orden para que los presos involucrados fueran trasladados a otra cárcel por seguridad y ésta no se cumplió, informó la afencia Reuters.