El ex comisario mayor y abogado Marcelo Di Pasqua encabeza en la ciudad el armado del partido provincial “Unión y Libertad”. Prometió una lista sin vínculos políticos y cuestionó duramente la desorganización en las fuerzas policiales: “La policía está asustada, no hay un equipo”.

El ex comisario mayor de la Policía Bonaerense y actual abogado Marcelo Di Pasqua lanzó su incursión en la política marplatense como jefe de campaña de “Unión y Libertad”, una nueva estructura partidaria de carácter provincial que busca instalarse en General Pueyrredon. En diálogo con la 99.9 dijo que “esto surgió porque un amigo me llamó. Yo me jubilé de la policía, actualmente soy abogado, tengo 55 años y sigo trabajando. No tenía intenciones de meterme en política, pero me ofrecieron armar algo en Mar del Plata y acepté, con una condición: no responder a ninguna corporación política”.
Con 30 años de residencia en la ciudad, Di Pasqua señaló: “Me da pena Mar del Plata. Es una ciudad hermosa, con muchos habitantes, pero los que vienen a hacer política son aves de paso. Yo quiero una lista con gente común, que no tenga nada que ver con la política. Acá hay médicos, abogados, profesionales, todos laburantes, todos de acá. No hay nadie que venga de afuera a hacer carrera política”.
Sobre el objetivo del espacio, expresó que su compromiso es exclusivamente local: “Mi compromiso es con Mar del Plata. Después, sí, pertenecemos a un partido, lo charlamos, somos un equipo, todo bárbaro, pero primero Mar del Plata”.
Consultado por la creciente violencia urbana en la ciudad, fue contundente: “Es un combo de todo. A la policía la han asustado durante mucho tiempo. Siempre dije que ‘el que no maneja, no choca’, y hoy el policía que menos trabaja es el que menos problemas tiene. Durante mi carrera tuve más problemas por laburar que por hacer macanas”.
En ese sentido, cuestionó el desorden actual dentro de la estructura de seguridad: “Mar del Plata tiene 3.000 policías y 50 áreas distintas. Es como si en un equipo de fútbol cada jugador tuviera su propio equipo. No hay coordinación. En 2015 había dos jefes departamentales. Cuando llegué, pedí que quede uno solo y armamos un equipo. Yo decidía, pero tenía un equipo. Y salimos. Me cruzaba con los comisarios en la calle, corriendo chorros. Había entusiasmo. Después nos hicieron pedazos”.
También apuntó contra los operativos “para la foto” y criticó la falta de presencia real en los barrios: “Hay que embarrarse los pies, salir a caminar. Y como toda guerra hay heridos. Algún policía va a tener algún problema, alguno se le va a escapar algo. Pero si queremos combatir esto, hay que salir a combatirlo. No de chamuyo en los medios con cinco patrulleros o un operativo que se ve a diez cuadras. Eso no sirve para nada”.
Respecto al diseño territorial de las fuerzas de seguridad, coincidió con que es un esquema obsoleto: “No se puede seguir con el mismo esquema de seccionales de los años 60. Las áreas están divididas, cada unidad tiene su jefe, cada jefe responde a un área distinta en La Plata. Y eso hace que cada uno se maneje por su lado. No hay coordinación ni un equipo que sume para la seguridad de Mar del Plata”.
Finalmente, cerró con una crítica a la centralización de decisiones: “Desde La Plata no conocen ni dónde está la Departamental. Si los largás con el auto solos, no saben llegar. Así no se puede manejar la seguridad de una ciudad como Mar del Plata”.