El ex titular de la SIDE habló en la 99.9 sobre la actuación de las fuerzas policiales en la manifestación de ayer y los datos comparativos respecto a la marcha de la semana pasada.
Luego de los incidentes que se generaron en la primera manifestación durante la semana pasada, ayer finalmente no se realizó un operativo para contener a los manifestantes en la zona del Congreso con las mismas características. El resultado fue distinto también.
El ex titular de la SIDE, Miguel Ángel Toma dio su punto de vista en la 99.9 sobre lo que se aprendió de un operativo que generó incidentes como el de la semana pasada: «se corrigieron los errores del miércoles anterior, es decir, hubo una mucho mejor disposición de toda la estructura del operativo. En primer lugar, se limitó fuertemente el ingreso a la ciudad, como de hecho ocurrió el otro miércoles, que ahí ingresaban como Juan por su casa. También hubo un mejor despliegue en la zona del Congreso. No se valló el Congreso, como fue la vez pasada, sino que se cortaron los accesos mucho más lejos, de manera que se impidió que se juntara en un mismo lugar una masa lo suficientemente grande como para que se produjeran situaciones de violencia como las que vivimos. En síntesis, hubo una mucha mejor disposición del dispositivo de seguridad, pero hay un dato que no es menor. Ayer participaron estructuras gremiales de la protesta, y cuando participa una estructura gremial, de alguna manera pone ciertos límites al manejo de las militancias más violentas o más de extremo. Yo creo que también esto fue un factor desde el lado de la protesta, le colocó una mayor cuota de racionalidad y cierto techo a las acciones más violentas. Yo creo que hay una combinación de estos dos elementos que me parece que es importante remarcarlos».
Todo el tiempo se busca pedir por la renuncia de la Ministra de Seguridad Patricia Bullrich y del presidente Milei, algo que resuena como una remembranza de la toma del Palacio de Invierno, un sueño postergado de la izquierda. «La izquierda está muy deteriorada en todo punto de vista. Hay una crisis muy fuerte desde el punto de vista ideológico, desde la caída de la Unión Soviética, por un lado, y por el otro, el hecho de que China, la gran potencia desafiante hoy de Occidente y de EE.UU. en particular, si bien mantiene una estructura centralizada política, al estilo marxista o comunista, la estructura económica está crecientemente caminando hacia un capitalismo, y en muchos casos un capitalismo de mercado, con lo cual hay una crisis ideológica profunda en las estructuras de izquierda. Y esto indica que cuanto mayor es la confusión, mayor es la crisis de identidad, mayor son los objetivos que se proponen como un mecanismo de mantener de alguna manera esa mística y la estructura de cuadros con las cuales se maneja. Yo creo que ese es un dato que no es menor. Creo también que lo que está puesto en evidencia con la actitud de las izquierdas radicalizadas, es su absoluto desapego por la democracia. Cuando alguien no puede alcanzar el poder por la vía del consenso electoral que una sociedad le otorga a un partido, a una estructura política, se ponen cada vez más duros los mecanismos de reivindicación de su propia identidad. Entonces ahí aparece ese extremismo que yo creo que va a ir creciendo, más que en las acciones, en el relato», expresó Toma.