La Secretaría de Derechos Humanos colocará el lunes una placa en el interior de la Escuela Militar de Montaña de Bariloche, en el predio que reclaman los mapuches; una entidad de los oficiales y suboficiales presentó un amparo.
A través de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, el Gobierno intensificó el plan de señalización de cuarteles del Ejército como sitios de memoria por haber albergado centros clandestinos de detención durante la dictadura militar. Este lunes colocará una inscripción alusiva dentro de la Escuela Militar de Montaña de Bariloche, en el terreno que es reclamado por comunidades mapuches, pese a que fuera del cuartel ya se exhibe una identificación similar. Por esta razón, la Secretaría de Derechos Humanos analiza suspender el acto hasta después de las elecciones.
La medida se suma a la reciente señalización instalada en las puertas del Regimiento de Infantería N° 1 Patricios, en la ciudad de Buenos Aires, pese a que la Justicia nunca demostró que en ese tradicional cuartel de Palermo hubiera funcionado un centro clandestino de detención en los años de la represión ilegal.
Ante ello, la Unión del Personal Militar Asociación Civil (Upmac), que representa principalmente a oficiales y suboficiales retirados de todo el país, presentó una acción de amparo y la Justicia pidió al Ministerio de Defensa que informe las razones que fundamentan la decisión de colocar la señalización.
La exhibición de carteles identificatorios de “sitios de memoria” en un lugar visible del histórico predio militar porteño –en la esquina de las avenidas Santa Fe e Intendente Bullrich- fue impulsada por la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, que conduce Horacio Pietragalla Corti, con el respaldo de la Dirección Nacional de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario del Ministerio de Defensa, repartición a cargo de Eduardo Jozami.
Al respecto, también sumó su rechazo el presidente de la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados, Alberto Asseff (Juntos por el Cambio), quien presentó un proyecto de resolución para reclamar al Poder Ejecutivo la remoción de una placa que señala al Regimiento Patricios como un centro clandestino de detención durante la última dictadura militar. “De ninguna manera está probado que haya sido así”, afirmó Asseff a LA NACION.
Estigmatización del regimiento
El coronel retirado Rubén Francisco Verna, presidente de Upmac, sostuvo en la demanda que la exhibición de un cartel que ubica al lugar como un centro clandestino de detención genera “graves consecuencias a todos aquellos que con honor y dignidad militar se han desempeñado en el Ejército en aquellos años, al ver estigmatizado su regimiento histórico”. Recordó que en el tradicional cuartel de los patricios se concentra la mayor actividad de conmemoraciones patrias y jamás se probó que haya existido un centro de las características que se le quiere atribuir”.
La señalización en la cancha de pelota a paleta de la Escuela Militar de Montaña de Bariloche reactivará la controversia entre los vecinos, en momentos en que el predio es objeto de incesantes reclamos de comunidades mapuches.
“Ya existe un cartel colocado en la entrada. Ahora se pretende exhibir otro adentro, para facilitar la realización de manifestaciones dentro del cuartel”, observó un militar de reconocida actuación en el Ejército, en diálogo con LA NACION.
La medida en favor de la señalización es respaldada por la Secretaría de Derechos Humanos del gobierno de Río Negro. Las autoridades provinciales argumentan que ya en el informe de la Conadep, de 1984, hay testimonios que mencionan la existencia de un centro clandestino de detención en el predio y allí habrían permanecido secuestradas unas 70 personas, entre 1976 y 1978.
“Tenemos la obligación de visibilizar los horrores que ocurrieron acá, para que nadie los niegue ni relativice”, dijo Pietragalla Cprti, al encabezar la colocación de la placa en el Regimiento de Infantería 1 Patricios, cuyo origen se remonta a las invasiones inglesas de 1806 y tuvo participación en la Revolución de Mayo de 1810. Según el actual gobierno, más de un centenar de personas fueron detenidos ilegalmente durante la dictadura militar.
Esa visión no es compartida por Upmac. Al objetar la señalización ante la Justicia, la entidad admitió que en esos años existieron “reglas inadmisibles” en la lucha contra la subversión, que “todos los argentinos de bien condenamos”. Pero añadió que “similares reglas fueron implementadas por las fuerzas subversivas, reconocidas con contundencia por quien ejercía la presidencia de la Nación en 1974, sin que la respuesta del castigo haya sido la misma”.
El coronel Verna recordó que en junio de este año la Sala I de la Cámara Criminal y Correccional Federal revocó un fallo del juez Daniel Rafecas, dispuso la libertad de los imputados, afirmó que “los procesamientos eran infundados, no existen prueba concreta de la responsabilidad” de los procesados y que incluso se desconoce quién pudo haber sido detenido ilegalmente en el citado regimiento. Los camaristas Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi revocaron los procesamientos de los militares Jorge Rubén Farinella, Ramón Manuel Vega, Carlos Washington Urqueta, Héctor Sergio Mónaco, Héctor Roberto Ranfagni y Alfonso Agustín Reuther, que integraban la plana mayor de la unidad en la década del 70.
“Instalar la placa representa un golpe insalvable para aquellos militares, que ajenos a todas las contingencias de lo que fue la guerra revolucionaria, ven en el Regimiento N° 1 Patricios la sumatoria de méritos y valores que dieron origen a nuestra patria como nación soberana”, fundamentó la Upmac en su presentación judicial.