La flamante consejera escolar fue muy concreta en su reclamo a través de la 99.9 luego de que Natalia Russo fuera elegida como presidenta del Consejo Escolar: “comenzó en el arroyismo, se pasó al PRO y militó ahí, ahora se pasó a CREAR y desde ahí se alió con el Frente de Todos. Perdió toda moral”.
Además de los problemas en la elección de la presidenta del Concejo Deliberante, Mar del Plata tuvo otro escándalo alrededor de la designación de la nueva presidenta del Consejo Escolar donde se quedó con el cargo Natalia Russo y fue muy criticada por el PRO ya que ha sido una representante de esa fuerza que fue cambiando de color político y hoy llega a ese lugar por un acuerdo de Crear con el Frente de Todos.
La flamante consejera Mónica Lence fue muy crítica en la 99.9 con la designación: “esto se naturaliza. Me dijeron mucho, esto es la política como si fuera justificativo para que esta conducta sea correcta. Es grave lo que pasó y en algún momento se tiene que terminar. No vengo de la política y no estoy acostumbrada a lo que pasó. Se supone que lo íbamos a discutir pero nunca nadie me llamó ni me atendieron el teléfono para sentarnos a hablar”.
Destacó que mientras haya consenso, no hay inconveniente en la elección, pero se escogió a la persona moralmente menos apta por sus constantes bandeos dentro de las fuerzas políticas: “acepto el voto de la mayoría, no cuestiono la metodología, sino a la persona que pusieron. Es una vergüenza y no podía no decirlo el primer día porque si después pasa algo yo había legitimado con mi silencio todo esto. Los funcionarios tenemos que empezar a ser serios. Fue algo dantesco, todos aplaudiendo y justificando lo que estaba pasando”.
Lo que tanto enoja a la representante de Juntos por el Cambio son las distintas “camisetas” que Russo se ha puesto dentro del propio Consejo: “no se como les da vergüenza a ella y quienes la acompañan. Ella comenzó en el arroyismo, se pasó al PRO y militó ahí, ahora se pasó a CREAR y desde ahí se alió con el Frente de Todos. Todo para ser presidente, para un puesto pero ha perdido todo tipo de moral, como le da la cara para responder. No puedo trabajar con gente de doble moral y no se como haré en lo personal para trabajar con estas personas”.
Con la indignación propia de quien se mete en política y se encuentra con estas habituales maniobras, destacó que ahora deberá comenzar con su tarea cotidiana mientras espera una respuesta: “estoy sorprendidísima, no puedo hacer más nada y tendré que salir a hacer mi trabajo pero esto se tiene que terminar, alguien tiene que dar la cara por esto”.