Localidades inundadas, cortes de electricidad, personas atrapadas, niños que no pueden abandonar sus colegios: el resumen de una jornada de diluvio.
Los verdaderos diluvios que se han dejado caer en Alemania en las últimas jornadas, especialmente este miércoles (01.06.2016), cuando los pronósticos hablaban de hasta 130 litros de agua por metro cuadrado en regiones de Baja Baviera, han dejado a más de nueve mil hogares sin electricidad, así como la inundación de los alrededores de una escuela, donde cientos de estudiantes quedaron atrapados y recién podrán volver a sus casas la noche del miércoles o incluso recién el jueves.
“El agua llegó desde allá. Es como si se hubiera roto una represa” dijo un hombre en Simbach an Inn a la revista Der Spiegel. Las escenas de casas cubiertas por el agua, vehículos volcados, calles destruidas y verdaderos ríos circulando por las avenidas de distintas pequeñas localidades se repitieron en vastas regiones del país. En zonas como Rottal-Inn y Passau, por ejemplo, se decretó alarma de catástrofe y cientos de funcionarios luchaban para rescatar a personas atrapadas por las masas de agua.
En horas de la noche, la Policía informó que buzos que revisaban una casa inundada hallaron cuatro cadáveres en Simbach. Un funcionario policial de Baja Baviera reportó a la agencia AFP que en algunos lugares el agua aumentó su nivel tan rápido que decenas de vecinos solo pudieron salvar sus vidas subiéndose a los techos de sus casas. Robert Kubitschek, portavoz de la oficina distrital de Rottal-Inn, en Baviera, dijo que en horas de la noche los niveles de agua “están bajando un poco”, pero reveló que hay numerosos “puentes que fueron destruidos o están intransitables”.
Clases suspendidas
Las interminables horas de lluvia torrencial también afectaron a otros estados del país, como Renania del Norte, Baden-Württemberg o Renania Palatinado. Aunque la situación más difícil se vivió en Simbach, donde 350 niños deberán pasar la noche en la escuela, que se ubica sobre una colina, pues las vías de acceso a ella eran intransitables. Algo similar ocurrió en Xanten, en Renania del Norte, donde numerosos estudiantes quedaron atrapados en una granja por las inundaciones. “Pero están seguros, secos en un granero y con suministros”, dijo un portavoz de los Bomberos.
En la misma localidad, un tren quedó atrapado en el barro, mientras en Düsseldorf numerosos túneles quedaron bajo el agua, igual que calles del centro de la ciudad. Sin embargo, es en Baviera donde los daños son mayores. Según el ministro de Finanzas de dicho Estado, Markus Söder, los daños provocaron pérdidas por decenas de millones de euros. La autoridad prometió que se trabajará “de forma rápida y eficiente” para remediar a la brevedad los problemas suscitados por la catástrofe pluvial.
Ciudades como Leipzig, Hannover o Bremen también sufrieron el azote de las inclemencias del clima, aunque en menor medida en comparación con el sur del país. Las clases fueron suspendidas en numerosas escuelas al menos durante el jueves y las autoridades ya informaron que miles de hogares podrían pasar la noche sin suministro eléctrico. Desde el fin de semana han fallecido siete personas por las inundaciones.