La periodista Teresita Dussart fue la encargada a través de su blog de dar a conocer una noticia importante en la causa Nisman: el fiscal ya le habría pedido un arma a un custodio previamente. Esta mañana, en la 99.9, habló sobre la información que maneja y señaló que además “tenía una fuerte carga narcisista, pero que no creo que haya tomado protagonismo en su trágico desenlace”.
El caso Nisman sigue sumando voces desde distintos ángulos, con informaciones diversas y con ópticas disímiles. A través de su blog “Relaciones Internacionales”, Teresita Dussart plantea una serie de datos respecto de la relación del fiscal Alberto Nisman con sus custodios que también sirven para entender el contexto de lo sucedido aquél domingo.
Esta mañana, en la 99.9, Dussart señaló que todos los datos “surgen de testimonios, pero coincide con informaciones anteriores. Era una persona con conductas particulares. Era bastante caóticos, autoritario, tenía cierta frialdad con los custodios. Se sentía amenazado, hay una conducta personal en las últimas horas de su vida que es particular”, aseguró.
Sobre lo que hablaron en sus declaraciones los encargados de la seguridad, destacó que “siempre se dirigían al domicilio por la puerta de servicio. Las divergencias en las declaraciones predicen una negligencia que es criminal en sí. Los dos custodios, hasta las 5 de la tarde no toman las disposiciones que tienen que tener cualquier persona que pertenece a la fuerza que ellos integran. Deberían haber desencadenado un procedimiento de gestión de riesgo, haber avisado a los superiores, pero todo se hizo en forma improvisada. Hay que averiguar si es incompetencia burda o si se traduce en algo más espurio”. Puede ser un punto importante dentro del desarrollo de una investigación tan compleja.
Sin embargo, no dudó en poner en tela de juicio su trabajo como fiscal y las conductas que tuvo en los últimos años. “Toda la gente que lo conoció dice que era un personaje muy preocupado de sí mismo, con una carga narcisista muy importante. No creo que eso haya tomado protagonismo en su desenlace trágico. Era caótico, atolondrado, preocupado de constituirse en una leyenda y eso tiene una importancia hoy; pero considero que los fondos que manejó para la causa AMIA fue dinero perdido porque hubo resultados nulos”.
También habló sobre Jorge Stiusso, otro de los nombres que cada vez toma más fuerza y que tenía una relación directa con Nisman: “Stiusso es un personaje extraordinariamente nefasto y lo sigue siendo, porque en la nueva SIDE conserva un núcleo de personas que son todavía gente muy potente. Cuando un gobernante hace un pacto con un personaje como Stiusso, cuando el pacto es roto genera sangre y vendetta. Una vez que se pacta con el diablo, es irreversible”, sentenció la periodista de doble nacionalidad (belga y española).
Luego fue más allá y afirmó que “había una organización mafiosa que se encubría en una secretaría de inteligencia que en 20 años no ha hecho nada para resolver la causa AMIA y no ha servido de nada para aportar información de inteligencia económica, para prevenir amenazas, para mejorar las conexiones al resto del mundo; que es lo que hacen todas las centrales de inteligencias”.
El detonante de todo podría haber sido la rotura en las relaciones entre Stiusso y Cristina Fernández que, al parecer, se dio de manera unilateral. “Stiusso hizo una especie de diáspora de la mafia italiana en Argentina y la pareja Kirchner se asoció a él como lo habían hecho otros gobernantes, pero nunca con tanto poder. Cristina rompió ese tejido tan fuerte que tenían con Stiusso”, justificó.
Las teorías que se manejan hasta el momento, cambian rotundamente los motivos de la muerte del fiscal y por eso, Dussart aseguró que “Nisman muere por suicidio o por asesinato. En éste último caso, puede ser por escarmiento o por vendetta y le quieren tirar un muerto”.
Por último, dejó entrever que la nota que salió publicada en la Revista Noticias con la portada donde estaba su propio rostro, no le había caído bien al fiscal Nisman y podría ser otro atenuante en su desenlace: “los periodistas de Perfil o Noticias, mantienen una línea distinta en lo que se llaman medios de oposición. No leí la revista, pero evidentemente al fiscal no le gustó nada el contenido porque no se labraba la visión del fiscal que servía de parábola de la independencia judicial. Nisman hacía mucho para vincular esa imagen”, concluyó.