Así lo afirmó en la 99.9 el concejal Gonzalo Quevedo después de haber recibido una carta documento del ex intendente Gustavo Pulti para que se retracte por haber dicho que se robaron todo de la municipalidad. “Es más, ahora me pregunto donde están los 7,5 millones de pesos que envío el SEDRONAR para la construcción de un centro de atención para las adicciones que no tenemos en Mar del Plata”, agregó a modo de denuncia.
Después de las declaraciones del concejal Gonzalo Quevedo indicando que la gestión Pulti “se llevó todo” y deberían “procesarlos a todos”; llegó la respuesta del intendente saliente que intimó al edil a través de una carta documento para que se retracte de sus dichos.
La respuesta de quien representa al radicalismo en la ciudad se dio a través de la 99.9 donde Quevedo indicó que “estamos trabajando con nuestros abogados para responder, pero desde lo político no pienso callarme por lo que estoy viendo y lo que he descubierto”.
Por otro lado, aclaró que no se callará por una carta documento y seguirá denunciando aquello que vaya encontrando: “tengo muchos interrogantes en la función que ejerzo día a día. Si la intención del intendente es amedrentarme para que me calle, no lo voy a hacer”.
Lejos de arrepentirse de lo dicho lo ratificó e incluso fue más profundo con sus sospechas: “nuestro deber como funcionarios públicos es decir la verdad. La municipalidad está destruida, con los brazos caídos y endeudada de una forma absurda e irresponsable”. Luego abundó: “no me voy a callar porque sería un cómplice de él”.
El gran interrogante que ahora se planteó Quevedo tiene que ver con un dinero que entró al municipio con un fin específico y que nadie sabe donde está. “Me estoy preguntando ahora donde están los 7,5 millones de pesos que envío el SEDRONAR para la construcción de un centro de atención para las adicciones que no tenemos en Mar del Plata”.
No sólo es grave que desaparezca la plata, sino que el fin de esa erogación era muy necesaria para la ciudad y hoy el municipio no tiene ese centro: “tenemos que derivar la gente a las ONG que se dedican a esto y no tenemos un recurso para encarar un hogar de internación y se puedan rehabilitar ante este grave problema”, concluyó.