El integrante de la Unión de Guardavidas Agremiados (UGA), Diego Sánchez Cabezudo, dialogó con la 99.9 sobre la toma del hall del Palacio Municipal, medida de protesta que mantienen desde ayer en reclamo por mejoras. “Lo que más nos preocupa es la reivindicación de las condiciones laborales”, señaló. Además, se refirió a un acta acuerdo que firmó Artime el año pasado y que hoy ya no tendría legitimidad.
Una parte de los Guardavidas de Mar del Plata decidió tomar el hall del Palacio Municipal como forma de reclamo por los elementos necesarios para llevar adelante su tarea.
Quien está al frente de la protesta es Diego Sánchez Cabezudo. Esta mañana, habló en la 99.9 y justificó la medida, que incluyó bombas de estruendo que tiraron ayer dentro de la Municipalidad. “Estamos en el Palacio Municipal limpiando la mugre que causamos estando todo el día de ayer y esperando que el Ministerio de Trabajo nos llame a conciliación”, dijo, sobre la situación actual.
Después de haber tomado el lugar, les llegó una denuncia penal de parte del Municipio: “la notificación llegó a través de los medios. El fiscal Fernando Castro nos vino a decir que había una denuncia y que él oficiaría de mediador con el Estado porque no quería ir en contra de trabajadores. Me pareció, por lo menos, coherente”. Por otro lado, Cabezudo quiso aclarar que la intención no era dañar a nadie: “al contrario de lo que se grafica en los medios, no pusimos en riesgo a nada ni a nadie en la Municipalidad”.
Hay una serie de reclamos sin respuesta que los llevó a tomar esta medida; también, una disputa relacionada con un acta acuerdo. “Hay dos o tres temas puntuales. Lo que más nos preocupa es la reivindicación de las condiciones laborales. Si bien trabajamos los 5 meses y cobramos, en la mayoría de ellos, en tiempo y forma, las condiciones laborales del trabajador guardavida en su lugar de trabajo son muy indignos. No es en todos los sectores, pero en los lugares más alejados nos tenemos que hacer las casillas nosotros con piedras de la playa, comprar cemento y chapas”, afirmó Sánchez Cabezudo. Luego, abundó: “no hay botiquín, no hay salvavidas, no hay prismáticos, no hay bote, no hay jetski, te puedo seguir nombrando muchas cosas que faltan porque hay miles”.
En representación de la Unión de Guardavidas Agremiados (UGA), resaltó que “el reclamo es puntual con el Municipio, somos 120 guardavidas municipales que van desde la escollera sur hasta el fin de Mar del Plata. Esto sucede hace años, hemos dejado pasar algunas cosas buscando obtener algunos logros económicos. Llegamos a este punto porque nos han ido negociando condiciones de trabajo por plata y, en función de no perder el poder adquisitivo del salario, hemos resignado dignidad”.
También se quejó de la forma en la cual se “vendió” el tema en los medios locales: “como lo ponen los medios, parece que somos locos que de la noche a la mañana se nos ocurre hacer esto, pero es una situación que lleva años. Esto se vino avisando y la idea era solucionarlo. Pablo García salió a decir que era solo económico, y encima lo disfraza diciendo que se ganan 15.000 pesos, pero ahí vienen los descuentos comunes. Un guardavida inicial está ganando 11.500 pesos por mes de bolsillo”.
El conflicto tiene un punto central, que es un acta firmada por el ex Secretario de Gobierno y que ahora parece no estar vigente: “todos los funcionarios nos han mentido. Marcelo Artime, en octubre, firmó un acta acuerdo de ampliación del servicio hasta el 20 de abril y ahora dicen que no tiene validez. Lo venimos hablando con Diego Monti desde que asumió, pero al parecer lo firmamos nosotros solos y no el Sindicato de Guardavidas, entonces temen tener problemas por otro lado también”.