La pediatra e integrante de Padres Organizados habló en la 99.9 sobre el reclamo que están realizando para que se vuelve a la presencialidad completa en la educación de los niños.
La presencialidad en las escuelas sigue siendo restringida y el formato de burbujas está siendo fuertemente criticado. Padres Organizados, una vez más, se pone a la cabeza del reclamo pidiendo que se cambien los protocolos que fueron diseñados a principio de año.
Noelia Oro, integra este movimiento en nuestra ciudad y además es pediatra por lo que brindó su punto de vista a través de la 99.9: “lo que nosotros criticamos y reclamamos en forma continua es la forma de gestionar la pandemia en el marco de la educación. Hemos observado, también el Estado lo baja lo evaluado, que los niños no son super contagiadores. A raíz de esto el plan jurisdiccional que se hizo en febrero de este año queda obsoleto para todas las medidas plásticas y dinámicas que tuvieron la pandemia. Ya tenemos a la mayor parte de los maestros vacunados con sus dos dosis”.
Por esta razón es que insisten en que se puede volver a una cierta normalidad dentro de las aulas para que todos los chicos puedan tener acceso a la educación: “los adultos jóvenes son los que más contagian la enfermedad y creemos que es innecesario seguir manteniendo el distanciamiento de un metro y medio entre cada niño cuando hoy en día el aforo de los restaurantes es el 70 por ciento y se puede realizar reuniones sin distanciamiento en bares. Es increíble que en un bar veas una mesa con 15 personas y en un aula esos 15 niños estén en distanciados”.
Los estudios que se han hecho incluso en nuestro país, dejan evidencia clara de la baja incidencia del COVID-19 en las escuelas: “el nivel de contagio en los colegios es menor al 1%, es bajísimo y le estamos haciendo un daño con el deterioro social. Hay escuelas en el ámbito público que por su infraestructura no han vuelto a clases. En el ámbito privado lo que se ve mucho es que van una semana y una semana; esto afecta claramente la educación formal y en una medida pedagógica que tenga continuidad. Cuando no concurren, hay un bache gigante porque sabemos que la virtualidad no puede sostener lo mismo que la presencialidad”.
Los sindicatos han hecho mucho para retrasar el regreso a la presencialidad, algo que es absolutamente increíble; teniendo en cuenta que los docentes deberían velar por la mejor educación posible: “hay un discurso predominante en el cual dicen “buenos que vuelvan todos y se contagien” cuando ya sabemos que no es así después de un año de pandemia. Los niños de pandemia son distintos realmente es algo para estudiar. Tenemos que volver a que sea lo más normal posible por lo menos en su vida porque el resto de los seres humanos volvieron a su vida”.
Una de las críticas puntuales que han hecho es la utilización de las burbujas y la inclusión del docente en esos grupos: “una mezcla gigante que se está haciendo por ejemplo es que el docente esté dentro de la burbuja de los niños. El docente utiliza máscara, barbijo y una separación de dos metros con los niños, ¿por qué razón va a estar dentro de la burbuja? La maestra es la que más se enferma dentro del aula. Se enferma la maestra y caen todos, se enferma un niño porque se enferma de un adulto que es familiar y caen todos por igual; cuando no es lo mismo. Es lo mismo que yo me aisle cada vez que reviso a un paciente COVID y no puede ser así porque yo lo reviso con los elementos apropiados; no hay necesidad de aislar a cada docente”.