La presidenta de la Sociedad de Fomento del Bosque Peralta Ramos, Dora Lamosa, explicó lo sucedido en la reunión que se llevó adelante en la Defensoría del Pueblo para hablar sobre el Barrio “Las Prunas”. Contrariamente a lo declarado por Fernando Rizzi, indicó que “no trajeron nada nuevo”.
La reunión entre las partes que están en conflicto por la construcción del Barrio “Las Prunas”, había sido descripta en este mismo medio como casi una especie de solución final al tema por el Defensor del Pueblo Fernando Rizzi.
Sin embargo, la realidad parece ser otra. La presidenta de la Sociedad de Fomento del Bosque Peralta Ramos, Dora Lamosa, brindó esta mañana en la 99.9 su visión sobre lo sucedido y aclaró que “no entendimos muy bien la llamada. Hubo 3 personas de OSSE y sólo una de ellas había estado en la reunión que tuvimos con Dell Ollio nuevamente. Estaba Manuel Regidor junto con un ingeniero también”.
En cuanto al contenido de lo dialogado, no aparecieron datos sobresalientes y mucho menos un cambio en las actitudes. “No trajeron nada nuevo. Estuvieron ellos, el Sr. Vespa por el Barrio Las Prunas, el Defensor del Pueblo Fernando Rizzi y un ratito estuvo Walter Rodríguez. La propuesta que nos trajeron fue entubar las cañerías y llevarlo hasta donde nace el cañadón que es la parte más inundable del bosque”.
Hay varias cuestiones que todavía a los vecinos les parecen muy turbias, sobre todo que no está habilitada la obra: “no entendemos bien si nos dicen que todo está aprobado, el expediente todavía lo tienen en La Plata. Pidieron que esta reunión no fuera escrita en el libro de actas y lo pudiéramos hablar con los vecinos”.
La medida que tomarían es la de entubar la caída del agua para que no transite por la calle, pero eso también puede traer sus problemas: “si bien trae una solución porque las aguas no estarían corriendo por las calles del bosque, sabemos que los tubos no se podrán colocar porque a 60 centimetros del suelo pasan todas las cañerías”, advirtió Lamosa.
La falta de comunicación entre las partes es una constante. La empresa que lleva adelante el emprendimiento no tiene comunicación con OSSE y viceversa: “ellos no estaban al tanto de que el ingeniero Dell Ollio nos había dicho en su momento que hasta que no viniera Hidráulica o Hídrica al lugar, él no iba a levantar la suspensión de obra. Dijeron que estaba todo aprobado y nosotros no lo vimos todo aprobado. Lo último que vimos fue un certificado de pre-factibilidad”.
Como parecen haberse quedado sin argumentos, empezaron a hablar de un enojo infundado de los vecinos, que lo único que reclaman es que las obras se lleven delante de la manera debida y sin perjuicio para el resto de los habitantes del barrio: “dicen que nosotros les tenemos bronca, pero tener un barrio privado nos beneficia de muchas formas”, agregó.
La solución está lejos, eso queda claro. Más allá del éxito que había anunciado Rizzi en la reunión que él mismo propuso. Los vecinos tienen en claro que no concurrirán a más reuniones que tengan esta tónica: “nos molesta que piensen que somos medias tontas o que no nos damos cuenta de las cosas. Ayer le mandé una carta al defensor del pueblo diciéndole que antes de aceptar otra reunión así queremos saber qué propuesta llevarán y quienes van a ir”, concluyó.