Nueva Zelandia anunció que endureció las reglas de su visa tras introducir criterios de idioma y habilidades y acortar la duración de los permisos de trabajo en respuesta a una “migración neta insostenible”.
Los cambios al esquema de Visa de Trabajador Empleador Acreditado (AEWV, por sus siglas en inglés) entraron en vigencia de inmediato y significa que Nueva Zelandia está “probando mejor el mercado laboral local y reduciendo los riesgos de dejar a los neozelandeses sin trabajo”, anunció este domingo la ministra de Inmigración del país, Erica Stanford.
En 2023, 173.000 ciudadanos no neozelandeses emigraron al país, según el comunicado.
Si bien todavía hay escasez de habilidades en áreas como la educación, dijo Stanford, “al mismo tiempo, debemos asegurarnos de que los neozelandeses estén al frente de la fila para empleos donde no haya escasez de habilidades”.
Los cambios en el esquema AEWV incluyen la introducción de un nivel mínimo de inglés, un nuevo requisito de habilidad mínima en forma de experiencia laboral o calificaciones y la reducción de la estadía continua máxima a tres años.
Los empleadores deberán asegurarse de que los inmigrantes cumplan con estos requisitos antes de contratarlos, y deberán declarar que ningún “neozelandés adecuado y disponible” solicitó un trabajo antes de ofrecérselo a un migrante. También deben anunciar ofertas de trabajo durante al menos 21 días y declarar “por qué los neozelandeses que presentaron su solicitud no fueron contratados”, según el Ministerio de Negocios, Innovación y Empleo de Nueva Zelandia.
Algunas funciones en los sectores del transporte y la atención estarán exentas de estos requisitos, según el sitio web del Ministerio de Empresas, Innovación y Empleo.