Un hecho tremendo de violencia sexual que conmueve a Francia.
Dos policías franceses fueron imputados hoy por la presunta violación en grupo de una turista canadiense de 34 años, en la histórica sede de la Policía Judicial de París, informó hoy la emisora France Info.
Los agentes, que pertenecen a la prestigiosa Brigada de Investigación e Intervención, quedaron en régimen de libertad vigilada tras pasar las últimas 48 horas detenidos junto a otros dos compañeros, que fueron liberados sin cargos. Según la versión filtrada a la prensa, uno de los policías reconoció haber mantenido relaciones sexuales con la demandante, pero de manera consentida.
Los hechos tuvieron lugar en la noche del pasado lunes al martes en los locales del 36 del Quai des Orfèvres, sede de los 1.700 agentes de la Policía Judicial que investigan unos 10.000 casos al año. Según “Le Parisien”, los policías conocieron a la turista en un bar de la zona de Saint-Michel y, a lo largo de una noche regada de alcohol, la invitaron a acompañarles la cercana sede policial, a orillas del Sena, donde la turista denuncia que fue violada.
La fiscalía cree que los agentes modificaron la escena donde se habría producido la violación e hicieron desaparecer unas gafas y unas medias de la víctima. Buscan también un teléfono con el que se habrían tomado fotografías de la turista desnuda. Se han practicado análisis médicos y se han recogido muestras de ADN, aunque todavía no se conocen los resultados. El ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, aseguró ayer que se tomarán todas las sanciones que correspondan si se establecen los hechos.