El marplatense Omar Gándara volvió a apostar a una nueva participación en el exigente Dakar que en 2013 une Perú y Chile con paso por Argentina.
Además de la gran prueba física y mental que implica ser parte de una competencia tan exigente, el piloto Omar Gándara, oriundo de San Luis pero radicado en Mar del Plata, tuvo que sortear diferentes complicaciones para poder llegar a ser uno de los 77 corredores de Argentina que participan de la prueba que terminará en Santiago de Chile el 19 de enero.
En Mar del Plata se generó una especie de polémica en la que se cuestionó a Gándara por llevar en su camioneta una publicidad que postula a la ciudad de La Punta (San Luis) como candidata a ser sede de los Juegos Panamericanos 2019. “Este año tuve la suerte de que el gobernador de San Luis, Claudio Poggi, me llamara personalmente para invitarme a conversar a la Casa de Gobierno, algo que fue un honor para mí, para proponerme llevar en mi camioneta la postulación de La Punta San Luis como ciudad candidata a ser sede de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos 2019. Va a venir la gente del Comité Olímpico Internacional el 20 de enero, justo cuando termina el Dakar, que es cuando se define qué ciudad va a ser sede. Estoy contento y orgulloso como puntano de que San Luis haya puesto los ojos en mí”, narró Gándara.
Y en ese sentido, agregó: “Lamentablemente en Mar del Plata no hay un reconocimiento desde la gestión deportiva, no sólo para mí sino para muchos deportistas de la ciudad. Corrí cinco carreras, todo el Litoral y la ruta 40 con la marca Mar del Plata y nunca recibí un llamado de nadie, nunca tomé un café con ninguna de las autoridades. Y encima me encontré con que el 5 de diciembre se cuestionó mi reconocimiento en el Concejo Deliberante. Por eso lo deseché. No se tiene una dimensión de lo que estoy haciendo para representar a la ciudad. Sé que hay otros temas más importantes que estos”.
El representante marplatense en el Dakar se sintió molesto porque algunos concejales cuestionaron su condición de Embajador Deportivo de Mar del Plata. “Fue a votación el hecho de declarar de interés municipal mi tercera participación en el Dakar y no hubo problema. Pero cuando se puso en consideración declararme Embajador Deportivo, un partido político se opuso. El proyecto lo presentó el partido radical y Acción Marplatense votó en disidencia. Se generó una polémica que nunca entendí sobre si yo corría para Mar del Plata o para San Luis. Tengo los huevos bien puestos para hablar con cualquiera si es que decido no correr más para Mar del Plata. Lo que yo hice fue venderle publicidad a San Luis. La sede de San Luis para los Panamericanos 2019 no compite con otra ciudad de Argentina, compite con Chile. No tiene nada que ver una cosa con la otra. Me enojé un poquito y les dije que si un reconocimiento no es por unanimidad, no lo quiero. Que los concejales sigan con sus cosas y que se ocupen de los temas importantes como la inseguridad, bacheo, calles y que me dejen tranquilo. Quiero aclarar que yo no tengo problema con ninguno de los muchachos que están en la comuna. No tengo ningún resentimiento, pero creo que fue un hecho corporativo que me molestó”, dijo enérgicamente.
Gándara profundizó sobre el tema al afirmar que se siente tan orgulloso de ser puntano como de ser marplatense. “Vine a Mar del Plata a los 25 años con el título abajo del brazo. Mi viejo era canillita. Le debo todo a Mar del Plata. Mi empresa, mi profesión, mi trabajo, mi sacrificio, mi familia. Estoy recontra orgulloso de ser de Mar del Plata. Pero también estoy orgulloso de San Luis que me brindó los estudios en una universidad pública sin haber pagado un mango. Entonces me tengo que dividir entre el querer de mi terruño y el querer de la ciudad que me albergó. Estoy promocionado una ciudad argentina contra una chilena. Estamos compitiendo internacionalmente por una candidatura como lo hicimos con Mar del Plata para los Panamericanos del 95. Realmente no entiendo por qué se armó tanto revuelo por este tema”, concluyó.
Y añadió: “Tengo un equipo maravilloso, pero la paradoja es que son todos de Luján. No conseguí armar un equipo en Mar del Plata. Mi equipo todo el año está en Luján. Leo Espinosa y todos los mecánicos, mi navegante Mauricio Jeromín. Corro para Mar del Plata, soy de Mar del Plata pero tengo mi equipo a 500 kilómetros. Todo es costoso y con trabas en el medio, pero sigo adelante”.
Más allá de los inconvenientes, Gándara tiene en claro de qué se trata el Dakar: “Es como ser parte de una tribu en la que todos somos solidarios y en la que hemos hecho muchos amigos de las pistas. En el Dakar aparece la verdadera esencia del ser humano que se descascara y se ve tal cual es, porque es una carrera de 20 días muy traumática, muy difícil, muy dura, en la que el cuerpo humano se enfrenta a tests físicos, psíquicos y mentales, aparecen las miserias y las bondades del ser humano. El Dakar es una carrera muy linda, muy humana, muy natural y que une culturas. Yo no corro contra los otros argentinos ni contra los otros competidores, por lo menos en mi caso yo corro contra la pista. El terreno es el que me va a arrodillar o decir que no siga. El desafío es vencer la dureza de la carrera y tratar de llegar a la parte final en Santiago de Chile”.
Contra viento y marea
“En general ha sido un año muy duro a nivel político y económico. Con las restricciones aduaneras, tuve muchos problemas para conseguir repuestos porque todo lo que yo armo es importado. Pero soy un luchador y le metí para adelante. Conseguí algo de sponsorización en Mar del Plata y otra parte la tuve que ir a buscar afuera. Esto nos pasa a todos los que estamos en esta competencia de alta exigencia. Creo que esta edición ha perdido un poco el entusiasmo para los argentinos, ya que si bien pasa por el país, no se larga ni se llega. Además se complicó muchísimo en repuestos, sponsoreo, traslados, logística. Van pocos argentinos porque es una carrera muy costosa. Más costosa que nunca. Pero yo soy aguerrido, no me rindo. Voy para adelante. Tengo esa fortaleza espiritual y física para hacerlo y soy medio testarudo”, aseguró Omar Gándara antes de partir a Perú.
77 argentinos
La quinta edición del Dakar en tierras sudamericanas es la número 35º en toda su historia y cuenta con la participación de 77 argentinos. De un total de 460 competidores, 190 lo harán en motos, 155 en autos, 75 en camiones y 40 en cuatriciclos. 53 nacionalidades estarán representadas, lo que representa un récord en la historia de la competencia.
A los ojos del mundo
La epopeya del deporte motor fue ideada por el francés Thierry Sabine y su primera realización se concretó entre el 26 de diciembre de 1978 y el 14 de enero de 1979, uniendo París con Dakar, la capital de Senegal, de donde tomaría su nombre hasta la actualidad. Se espera que las imágenes de la competencia de este año se emitan en 190 países.