El motor del gigantesco MSC Opera quedó bloqueado e, incapaz de frenar su inercia, chocó contra un el “River Countness” en el canal de Giudecca. Tras el accidente se renovaron las peticiones de prohibir la llegada de cruceros a la icónica ciudad italiana.
Un gran crucero descontrolado se estrelló este domingo contra un muelle y una embarcación turística de río en un bullicioso canal de Venecia, dejando un saldo de al menos cuatro personas heridas, según medios italianos.
La colisión ocurrió a las 8:30 de la mañana en San Basilio-Zattere, en el canal de Giudecca, un importante acceso que lleva a la Plaza de San Marcos en la ciudad nororiental italiana.
Videos publicados en redes sociales mostraban cómo el crucero, al parecer incapaz de frenar su inercia, hacía sonar la bocina mientras embestía contra el mucho más pequeño barco fluvial y un muelle, mientras docenas de personas huían en pánico del enorme buque de 13 pisos.
Cuatro personas resultaron levemente heridas en el accidente, indicaron las autoridades portuarias. Todos ellos fueron trasladados a un hospital e iban a bordo del barco de turismo accidentado, el “River Countess”.
Venecia es un destino muy popular para turistas y cruceros, especialmente durante la temporada estival.
El crucero, el MSC Opera, iba a atracar en una terminal para pasajeros en Venecia cuando sufrió un problema mecánico, señaló la empresa propietaria del crucero, MSC Cruises. Las remolcadoras que guiaban al barco intentaron detener la enorme embarcación, pero no lograron evitar que chocara con el barco fluvial.
“Las dos remolcadoras intentaron detener al gigante y entonces un cable de remolque se rompió, cortado por la colisión con el barco de río”, dijo Davide Calderan, presidente de una asociación de remolcadores en Venecia, a la agencia italiana de noticias ANSA.
El motor del crucero estaba bloqueado cuando el capitán pidió ayuda, señaló Calderan. En tanto los dos barcos remolcadores que lo guiaban hasta Giudecca intentaron frenar el buque, que ganaba velocidad, pero las cadenas que lo llevaban atado se acabaron rompiendo por la presión, añadió.
El “Opera” ya había presentado problemas mecánicos en 2011 durante una travesía por el Báltico, puede transportar hasta 2.500 pasajeros y alberga un teatro, una sala de baile y un parque acuático para niños.
Tras el accidente se renovaron las peticiones de prohibir los cruceros en Venecia, un tema polémico desde hace años en una sobrepasada por el turismo.